Los despidos anunciados en Intel tienen varios factores en común con los recortes de planillas realizados en otras firmas tecnológicas globales durante los últimos años.
Intel realizará una reducción del 15% de su planilla (unos 15.000 trabajadores). La medida está relacionada con su rezago competitivo frente a rivales como AMD, TSMC y, especialmente, Nvidia en el lanzamiento de procesadores para inteligencia artificial (IA).
El reflejo en el balance final de ingresos, gastos y pérdidas dio la campanada.
Como es usual, las medidas se enfocan en recorte de costos (por unos $10.000 millones hasta el 2025), incluyendo en la planilla, mientras acelera el paso para diseñar y producir nuevos chips capaces de facilitar a las computadoras a utilizar las aplicaciones de IA.
Pero ese ajuste de planilla de Intel se suma a otros recortes de diferentes firmas tecnológicas.
El factor: todo lo que sube...
En el 2023 unas 1.183 firmas tecnológicas despidieron a 262.146 empleados a nivel global, 59% más que en 2022.
El recorte ocurrió después del incremento de las ventas de la industria desde la pandemia, cuando las empresas de diferentes actividades económicas y sus colaboradores, así como estudiantes y otros grupos afectados, debieron invertir en sistemas y equipos para trabajo, educación y comunicación remota.
En ese periodo Apple, Amazon, Meta, Microsoft y Alphabet (propietaria de Google) crearon 900.000 empleos adicionales en total. A la vuelta de la esquina, con el declive que siguió, esas mismas firmas recortaron aproximadamente 112.000 empleos.
Los analistas especularon que en 2023 había pasado lo peor.
Pero en la primera mitad del 2024 continuaron los ajustes de planillas en Google, Amazon, Meta, Microsoft, Salesforce y otras firmas, incluso en equipos centrales de operaciones, “para reducir costos y optimizar el desempeño de sus inversiones”.
Eso a pesar que las big tech no mostraban números rojos y más bien contabilizaban ventas que subieron 81% más que cinco años antes y su valor de mercado llegó a casi $3,5 billones.
Con todo, Apple, Amazon, Meta, Microsoft y Alphabet sumaban 2,16 millones de empleados, un 71% más que antes de la pandemia.
El factor: IA
Hay varios factores adicionales para el ajuste en planillas.
Uno anunciado desde antes de la pandemia por el Foro Económico Mundial, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y la Organización Internacional del Trabajo: la cuarta parte de los empleos son afectados por la automatización con la implementación de la IA y su sucedáneo, la robótica.
La promesas de incremento nuevos tipos de empleo no están cumpliendose como se esperaba.
Se une lo que podría considerarse otro factor más: todavía las firmas deben acelerar el paso a la IA y necesitan dinero. “Para poder invertir en la ambiciosa visión a largo plazo en torno a la IA”, reconoció Mark Zuckerberg, CEO de Meta, recientemente en una videoconferencia con analistas.
Este domingo en mi bandeja de entrada de correo electrónico había una alerta: “Amazon despide a más de 18.000 empleados y pone 750.000 robots para tareas de logística”
El anuncio se realiza después que la firma de Jeff Bezos anunció, hace unos meses, que se centraría en ajuste de costos, congelando contrataciones, pausando expansiones de centros de distribución, y cortando servicios que no dan frutos.
El uso creciente de IA y robots es el reflejo del futuro, tanto de la logística y del comercio electrónico como de otros sectores: un camino inevitable para mantener su competitividad.
¿La aceleración a estas inversiones de automatización estaría rompiendo el equilibrio que se esperaba entre la utilización de avanzadas tecnologías y la adaptación del empleo?