Hace unas semanas abrí el WhatsApp y encontré un mensaje de la misma aplicación. Presentaba la comprobación rápida de privacidad.
“Controla qué compartes y con quién lo compartes”, indicaba.
WhatsApp es la app (de mensajería o de red social como desee calificarla) que más se usa en Costa Rica, según el estudio Red 506: casi 4,4 millones de usuarios por mes en este 2023.
Y no ha dejado de crecer: en 2019 eran 3,1 millones.
Es también la red que facilita la comunicación laboral, de negocios y personal. Y la que más nos acosa a cada momento.
Hay tres motivos básicos para hacer controlar las comunicaciones a través de WhatsApp:
1. Privacidad
Resguardar los mensajes que envía y que recibe de las miradas ajenas. Si usted es de las personas que deja su móvil en cualquier sitio y sin el protector de pantallas, le conviene resguardar su privacidad.
Quién nada debe, nada teme. ¿Cierto?
Pero no estamos para que otras personas vean (y divulguen luego en corrillos o, peor, a viva voz) sus mensajes.
2. Seguridad
Muchas personas utilizan las aplicaciones de mensajería y, en especial, WhatsApp para intercambiar información personal, de ventas, de negocios y profesionales.
¿Es comunicación que deben ver otras personas?
Definitivamente, no.
El avance de una venta, de un negocio o de sus actividades profesionales y personales dependen en buena medida de la discreción.
Es normal que hoy WhatsApp sirva para compartir una cuenta bancaria, datos personales, teléfonos, acuerdos y contratos, incluso.
3. Protección
Cada persona debe adoptar una serie de medidas de protección tanto “internas” como “externas”.
En el primer caso, como indicamos en un post anterior, cuidado con los archivos que descarga desde su aplicación de mensajería y desde el WhatsApp.
Pueden incluir un software espía o un keylogger, que lee lo que usted digita. Hasta sus cuentas bancarias.
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En el segundo caso, se deben implementar medidas para que nadie abra su celular y su aplicación de mensajería y lea quién le envía mensajes y su contenido.
A menos que usted desee divulgar lo que conversa con su pareja, con su familia, con sus amistades, con sus compañeros y excompañeros de colegio o de trabajo. Si es así, son sus contactos los que deben decidir si se comunican con usted.
¿Qué hacer?
1. Seguridad del móvil
Para proteger sus mensajes de miradas externas, lo primero es activar las medidas de seguridad del dispositivo.
Actualmente la mayoría de modelos cuentan con sistemas biométricos (lectura de huella digital, cara o de los ojos) para poder activarlo. Yo uso huella digital.
2. Seguridad de apps
Cada app tendrá sus propias medidas de seguridad. La más elemental: cerrar la app cuando la deja de usar y digitar sus claves para abrirlas cuando lo requiere.
Algunas se activan con el mismo sistema biométrico del móvil.
¡Úselo!
3. Seguridad de WhatsApp
Vaya a configuración y use la comprobación rápida de privacidad.
Esta funcionalidad permite:
—Seleccionar quién puede contactarle.
—Controlar la información personal.
—Añadir privacidad a los chats.
—Seleccionar quién puede contactarle o llamarle por medio de la app.
—Decidir quién puede añadirle a grupos: cualquier persona, sus contactos o solamente algunos de sus contactos.
—Silenciar las llamadas de desconocidos (lo malo es que sus números seguirán mostrándose en las pestañas de llamadas y en las notificaciones).
—Bloquear contactos: muy eficiente. (Lo hago a diario con gente que no entiende que una comunicación oficial se comunica por correo electrónico y no por WhatsApp.)
—Revisión previa: se puede obtener una previa de los textos de los mensajes que le envían.
—Duración: se determina el tiempo en que se mostrará un mensaje en un chat. Uso el de un día y siempre advierto a las personas que el mensaje “se autodestruirá” en 24 horas.
—Notificaciones: usted decide si quiere tener una previsualización de las notificaciones de mensajes entrantes y de las reacciones. (Yo las desactivé todas. Así no me estreso.)
—Añadir una protección adicional a la cuenta: por ejemplo, para abrir la app solamente con el Face ID o la huella digital.
—Verificación de dos pasos: cuando se requiera abrir el WhatsApp en otro dispositivo no registrado.
Hay una razón adicional
Recuerde una cuarta razón para todo esto: la desconexión es necesaria en nuestras vidas.
Al quitar las notificaciones se logra más tranquilidad, menos estrés, poder tener una siesta, dormir o una reunión sin las molestas alarmas de un mensaje entrante o de una reacción.
Algunos, por supuesto, serán mensajes importantes.
La mayoría, sin embargo, son: chistes, memes, bromas, comentarios sin sentido, opiniones sin fundamento, fake news, tonterías.
Pongamos serios. Esos mensajes y esas reacciones podrá verlas en otro momento.
¿Qué hago para saber si recibí un mensaje que realmente importa del trabajo o de la familia?
Cada cierto tiempo puede ingresar a revisar. Usted tomará control de su día, de sus horas y de su vida.
Verá el cambio que tendrá.