Si hay algo que sabemos, es que el trabajo híbrido llegó para quedarse. Pero la gran pregunta es: ¿Cómo será la próxima década de trabajo? ¿Cómo se prepararán? La modalidad de trabajo híbrido nunca había tenido tanta relevancia como en la época actual.
El contexto pandémico obligó a empresas de todo el mundo a repensar las posibilidades de su fuerza laboral para alternar la presencialidad con el trabajo en remoto y para reducir la brecha entre lo físico y lo digital. Desde la pandemia, por ejemplo, en LinkedIn se han multiplicado por cinco veces la cantidad de puestos de empleo en remoto.
Para prosperar en este nuevo mundo, todas las organizaciones necesitan un tejido digital que una a la organización con una comunicación, colaboración y creación seguras. Este tejido permitirá flexibilidad y fortalecerá las conexiones entre las personas y los equipos.
Microsoft, por medio de los resultados de su Índice de Tendencias Laborales, entendió que, independientemente del lugar de preferencia que tenga una persona para trabajar, su elección se va a basar en poder concentrarse mejor. Con esta consigna clara, la compañía decidió hacer ajustes en sus productos y servicios que contribuyeran con esta misión. A la vez, hizo ajustes en las políticas para sus más de 160.000 colaboradores en todo el mundo, y así permitirles una mayor productividad desde cualquier lugar, independientemente del dispositivo o del momento, buscando una mejor calidad de vida.
El trabajo no ocurre en un silo; requiere comunicación y colaboración con personas tanto dentro como fuera de la organización. Se quiere de herramientas que brinden nuevas capacidades para eliminar barreras y hacer que sea más fácil y seguro colaborar con cualquier persona. Como parte de los ajustes que desarrollaron en Microsoft Teams, se ampliaron los idiomas en los que pueden mostrarse subtítulos y en los que se hacen transcripciones. Actualmente hay 27 idiomas, entre los que aparecen el alemán, portugués, japonés e hindi, entre otros.
En Teams ahora se pueden moderar, filtrar o estructurar las preguntas y respuestas antes, durante o después de una reunión. De esta forma los organizadores o moderadores designados pueden brindar una experiencia más organizada y ágil durante las llamadas.
Recientemente, Microsoft anunció Windows 365, un servicio en la nube que permite utilizar las aplicaciones, datos y configuraciones desde cualquier dispositivo, para facilitar que una persona avance con su trabajo independientemente de que se traslade, o para reducir las complicaciones que implica la emisión de nuevo hardware para empleados nuevos o temporales.
Las aplicaciones Microsoft 365 ahora cuentan con la posibilidad de que varias personas trabajen de manera simultánea en documentos de Word, Excel o PowerPoint sin problemas y aprovechando la posibilidad del autoguardado. Esto está complementado por la capacidad de mejorar la confidencialidad del contenido.
Acá se puede ver una lista más extensa de otras innovaciones que ha aplicado Microsoft en los últimos tiempos, enfocándose en la productividad.
Las políticas para el trabajo híbrido cambiaron
Dentro de las novedades que conllevan el trabajo híbrido, también hay que tomar en cuenta aquellas que implican cambios sobre cómo trabaja cada persona. Microsoft lanzó dos guías que están disponibles de forma pública con recomendaciones para líderes tomadores de decisión en las empresas (Trabajo híbrido: una guía para los líderes de negocio), así como para la fuerza laboral (Guía de Flexibilidad para el Lugar de Trabajo Híbrido). Las políticas consideran casos como cuando una persona pide que le permitan trabajar desde su casa, desde otro país o, inclusive, que pida un ajuste de horas en su itinerario laboral, en función de un traslado geográfico. Estos son algunos ejemplos de estos ajustes:
· Microsoft acepta y facilita la diversidad de maneras de trabajar, algunos en remoto, otros de forma híbrida, etcétera.
· Es consciente de que, ante la variedad de solicitudes que se pueden presentar, como trabajar desde otro lugar o una cantidad diferente de horas, implica diferentes procesos de aprobación, la presentación de documentos específicos o hasta variaciones en la compensación económica; esto dependerá de la solicitud.
· Las decisiones de aceptar o no una solicitud de flexibilidad debe estar justificada en una comunicación clara y directa que permita entender, de ambos lados, lo que implican los ajustes.
· La empresa acepta que la relación con sus colaboradores se basa en la confianza y en el buen uso de la tecnología, entendiendo las necesidades tanto de la empresa como de las personas.
· Se establecen acuerdos en el equipo para asegurar la mejor implementación de las nuevas formas de trabajo, según se establezcan.
El enfoque de Microsoft como respuesta al trabajo híbrido es un proceso en constante evolución y se basa mucho en procesos de escucha tanto de colaboradores como de clientes, así como en análisis de datos. De la misma manera en la que sus guías sirven para replicarlas como hojas de ruta en otras empresas, también se presentan como una evidencia de que los ajustes son viables para crear un modelo operativo nuevo y flexible.