Los ministros de Comercio de Costa Rica, Islandia, Nueva Zelanda y Suiza firmaron, este viernes 15 de noviembre, el Acuerdo sobre Cambio Climático, Comercio y Sostenibilidad (Accts, por sus siglas en inglés); el cual permitirá la liberalización de aranceles de hasta para 300 bienes y 100 servicios ambientales.
Esa lista incluye artículos como turbinas eólicas, calderas de biomasa, paneles solares, bicicletas, vehículos eléctricos; así como actividades con impacto ambiental en campos como el diseño arquitectónico o las asesorías en ingeniería, según declaró el ministro de Comercio Exterior, Manuel Tovar, en una reciente conversación con EF sobre el acuerdo comercial.
La firma se desarrolló por medio de una ceremonia virtual, según indicó Comex; justamente cuatro meses después de que se informó sobre el cierre de las negociaciones.
En total, se desarrollaron 15 sesiones entre las naciones involucradas desde 2020, luego de que Nueva Zelanda impulsó la idea en el marco de la Cumbre de Acción Climática de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) de 2019.
Los cuatro países involucrados son miembros de la Organización Mundial de Comercio (OMC) y de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
‘Acuerdo pionero’
Por medio de un comunicado de prensa, el Tovar calificó el acuerdo como “único en su clase” y agregó que “demuestra que el comercio puede también cumplir un rol fundamental en la lucha contra el cambio climático“.
Además, Comex destacó que el texto no solo incluye exoneraciones arancelarias, sino otras medidas innovadoras.
Por ejemplo, el documento también señala parámetros para disciplinar y eliminar subsidios perjudiciales a los combustibles fósiles; al tiempo que introduce directrices para implementar programas voluntarios de etiquetado ambiental.
Según Comex, este último factor favorecería a las empresas, haciendo que “puedan añadir valor a sus productos amigables con el ambiente".
Además de los países ya firmantes, Tovar declaró que se trabaja para atraer a otros miembros con vocaciones similares como Canadá, Corea del Sur, Japón, Chile y Colombia, entre otros. Sin embargo, esta es una tarea difícil, según la exministra de Comercio Exterior, Dyalá Jiménez.
La exjerarca de Comex entre 2018 y 2019 destacó en una reciente columna publicada por EF el valor del acuerdo como “otra muestra de liderazgo del país en el plano internacional", pero agregó que las medidas para eliminar los subsidios a los combustibles fósiles podrían “disuadir a algunas economías más grandes de adherirse“.
El acuerdo comercial ahora tendrá que pasar a análisis de la Asamblea Legislativa para su ratificación, como ocurre con cualquier acuerdo internacional.
Según el propio texto, entrará en vigor hasta que al menos tres de los cuatro países signatarios notifiquen la finalización de sus procesos internos de autorización.
Costa Rica exportó bienes por $19.227,7 millones totales en 2023; de los cuales solo una fracción poco significativa inferior al 0,01% se dirigió a los países incluidos en el tratado. Según estadísticas de Procomer, se contabilizaron exportaciones de bienes por $9,46 millones a Suiza y por $3,96 millones a Nueva Zelanda; mientras que no hubo registro alguno en conexión con Islandia.
En materia de importaciones, el país introdujo bienes por $23.450,1 millones, de los cuales apenas un 0,7% provino de las otras tres naciones: $163,71 millones de Suiza, $7,26 millones de Nueva Zelanda y menos de $470.000 de Islandia.