Luego de años de pausa, Costa Rica vuelve al ruedo de la negociación de acuerdos comerciales con el Acuerdo sobre Cambio Climático, Comercio y Sostenibilidad (Accts, por sus siglas en inglés) que encadena los flujos de intercambio global de bienes y servicios con temas ambientales.
La iniciativa, que se lanzó oficialmente en setiembre de 2019 en el marco de la Cumbre de Acción Climática de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), también está conformada por Nueva Zelanda, Noruega, Fiyi, Suiza e Islandia.
Estos seis países miembros de la Organización Mundial del Comercio (OMC) plantean incluir cuatro disciplinas comerciales, entre ellas la eliminación de aranceles al comercio de bienes ambientales.
Las disciplinas comerciales son aquellas que, con independencia de las medidas de aranceles (impuestos de mercancías) u otras medidas de administración del comercio, rigen el intercambio de las mismas como, por ejemplo, las medidas sanitarias y fitosanitarias, volúmenes de importación y exportación, y otras que influyen en el intercambio de productos.
Las autoridades locales apuestan a que el acuerdo genere un “ganar-ganar” para Costa Rica, sin embargo, “todavía hay bastante trabajo por delante”, dijo Andrés Valenciano, ministro de Comercio Exterior.
Pretensiones del acuerdo
Para lograr sus objetivos, los miembros del Accts acordaron incluir las siguientes disciplinas en cuatro áreas específicas:
- Eliminación de aranceles al comercio de bienes ambientales.
- Eliminación de barreras al comercio de servicios ambientales.
- Promoción de buenas prácticas para el desarrollo de sistemas voluntarios de eco-etiquetado.
- Eliminación de aquellos subsidios y compromisos “que dañan el ambiente”, explicó Comex.
Con respecto a la primera premisa, Karen Chan, asesora del ministerio, puntualizó que en el marco de la negociación solo se habla de bienes ambientales del sector industrial.
A la fecha se han recibido alrededor de 550 nominaciones -bienes candidatos- propuestos por los seis países, según mencionó Chan en una reciente sesión informativa realizada por el Comex. Entre este tipo de productos se podrían llegar a incluir aquellos relacionados con la generación de energía limpia como turbinas eólicas; así como equipo para monitorear la contaminación del agua o el aire.
El hecho de que un producto haya sido incluido en la lista bajo consideración no significa que va a quedar cubierto por las disciplinas del acuerdo, pues eso dependerá de lo que suceda durante el proceso de negociación.
El objetivo es que estas disciplinas comerciales contribuyan con el reforzamiento de políticas ambientales, especialmente en las que están más ligadas a la descarbonización de la economía y a la mitigación del cambio climático, explicó Valenciano.
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Oportunidades
Formar parte del Accts abre una ventana de oportunidad para que Costa Rica refuerce el acceso a tecnologías y procesos más amigables con el ambiente, y atraiga inversiones productivas en estas áreas.
También, fortalece la credibilidad y la reputación de Costa Rica como un país “altamente” comprometido con la sostenibilidad y apto para desempeñar un liderazgo a nivel mundial en este tema.
Esta es una posición que respalda la presidenta de la Cámara de Exportadores de Costa Rica (Cadexco), Laura Bonilla, quien aseguró que Costa Rica tiene que explorar y atraer nuevos mercados especializados que esperan bienes y servicios más ecológicos.
“Los exportadores y los productores debemos ajustarnos a los movimientos globales sostenibles (...), especialmente, porque dependemos de un mercado internacional que va dictando la pauta en sostenibilidad”, comentó Bonilla.
El equipo nacional que lleva adelante el proceso de negociación está compuesto por el Comex, el Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), el Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC) y el Ministerio de Relaciones Exteriores.
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Acuerdo en proceso
La pandemia del COVID-19 causó un rediseño en la mecánica de trabajo pues los procesos de negociación de manera presencial se vieron sustituidos por sesiones virtuales.
Esto ha provocado que el ritmo de avance sea menos fluido ya que la diferencia horaria entre las naciones participantes ha sido uno de los principales desafíos a enfrentar.
Por ello, el Ministro del Comex indicó que es difícil dar una fecha estimada de culminación del proceso de negociación, sin embargo, expresó que los países que integran el Accts continúan trabajando con “un alto nivel de compromiso” para avanzar lo más que se pueda de aquí al otro año.
Además, dijo que aún hay mucho trabajo por delante, debido a que los grupos técnicos recientemente comenzaron a entrar en la fase de propuestas de texto.
“Los países que lanzaron la negociación del Accts aspiran a concretar el acuerdo mediante un proceso ambicioso, flexible, transparente, expedito y que contribuya a reforzar el Sistema Multilateral del Comercio basado en reglas. Los miembros han manifestado su interés en que el proceso de negociación logre un acuerdo de alta calidad en el menor tiempo posible”, menciona el Comex en su sitio web.
Las sesiones de trabajo que se contabilizan hasta la fecha se llevaron a cabo en junio, setiembre, y noviembre-diciembre (las tres en el 2020). Durante este año, se han realizado dos reuniones: una en marzo y la otra en mayo-junio.
La próxima sesión está programada para efectuarse entre finales del presente mes y las primeras tres semanas de setiembre.