Costa Rica y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) recalcaron este lunes 20 de diciembre en San José que Latinoamérica y el Caribe necesitan financiamiento para superar la crisis económica en la que están algunos de sus países por la pandemia de COVID-19.
El presidente costarricense, Carlos Alvarado, y la vicesecretaria general de la ONU, Amina Mohammed, se reunieron para analizar aspectos que permitan acelerar la recuperación de la región, tras casi dos años de pandemia.
"Para que los países puedan avanzar hacia la recuperación, se requiere financiamiento flexible y en condiciones preferenciales", señaló el gobierno costarricense en un comunicado tras el encuentro.
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Costa Rica propuso a Mohammed un plan para impulsar con financiamiento internacional la recuperación económica, la protección social y el empoderamiento femenino e inclusión productiva, aunque no se dieron detalles.
"La pandemia ha provocado una incalculable crisis mundial y ha agravado la inequidad, pobreza y exclusión. A raíz de esto, más que nunca, nuestra región puede trabajar con su diversidad, como una zona unida, por la búsqueda de soluciones innovadoras y solidarias", dijo Alvarado.
"De nuestra parte seguiremos presionando por un cambio en la arquitectura financiera en los próximos años. Si se quiere paz, hay que invertir en desarrollo", consideró Mohammed, una ex ministra de Ambiente de Nigeria.
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La vicesecretaria general añadió que es importante marcar la ruta del financiamiento y que "la región comience a pensar en el diseño de instrumentos particulares para el impulso del desarrollo de la zona".
Costa Rica aboga por el denominado Fondo para aliviar la Economía COVID-19 (FACE), una propuesta que sometió a la comunidad internacional en setiembre del 2020.
En aquel momento, Alvarado habló de un “fondo de apoyo extraordinario de medio trillón de dólares, financiado con el 0,7% del Producto Interno Bruto (PIB) de las economías más grandes y fuertes del mundo [aquellas que representan el 80% del PIB mundial]”.