Los reportes de emergencia de las cinco viviendas del residencial Altos de Leonamar que cayeron a un precipicio producto de un deslizamiento de tierras en Punta Leona, Garabito, llegaron con varias horas de retraso a las autoridades competentes para atender el suceso. Así lo anunciaron distintas instituciones.
Si bien el hecho no tuvo víctimas humanas, sí tiene el potencial de ser un área de riesgo que debe analizarse, según indicaron a EF especialistas en derecho inmobiliario.
“A pesar que en este caso no existieron pérdidas humanas, sí existe una obligación de notificar tanto a las autoridades de emergencias, como a aquellas entidades gubernamentales que tienen injerencia en este tipo de temas. Y, está claro, existe la obligación de parte de la administración del condominio de permitir el ingreso de las autoridades para la atención de la emergencia”, señaló Guillermo E. Zúñiga, especialista en derecho inmobiliario de la firma Ecija Legal.
Aunque los condominios y residenciales son propiedad privada, los administradores están en la obligación ciudadana de reportar cualquier emergencia que suceda o afecte las instalaciones. Los propietarios también tienen el derecho de pedir ayuda a las autoridades.
Existen casos que se resuelven a nivel interno, como lo son la fuga de agua y problemas vecinales, es decir, eventos de poca magnitud. No obstante, incendios, caída de las edificaciones y muertes son algunas de las afectaciones que implican la colaboración de especialistas y análisis de los daños.
“La administración del condominio en cuanto se entere de eso tiene que llamar a las autoridades para controlar cualquier cosa que haya pasado, ya sea que hubiesen personas enterradas o no. Normalmente el deber es de la administración y propietarios”, indicó Juan Cordero, abogado inmobiliario de la firma Consortium Legal.
De acuerdo con Cordero, es poco usual que se presenten ese tipo de emergencias en condominios de lujo. Este suceso puede llevar a desvalorizar el proyecto habitacional.
La importancia de reportar un deslizamiento, aunque no existan pérdidas humanas, radica en los estudios que hacen las autoridades respectivas para conocer el estado del terreno y de esa manera alertar a los vecinos.
Un día después de lo acontecido en Punta Leona, distintas autoridades se presentaron al lugar para realizar los estudios correspondientes. La CNE envió un geólogo para realizar una inspección y de esa manera analizar el impacto en el terreno.
“Esto lo hacemos (las inspecciones) con la finalidad de proteger la vida de personas y poder evaluar qué otras estructuras podrían estar comprometidas”, dijo Alejandro Picado, presidente de la CNE.
El Cuerpo de Bomberos también está presente en la zona con 60 funcionarios de rescate especializado, drones, unidades de extintores y una unidad canina.