Tren eléctrico en la Gran Área Metropolitana (GAM), Tren Eléctrico Limonense de Carga (Telca) y trenes hacia el Pacífico y el Atlántico. Estos son los cuatro grandes proyectos ferroviarios que tiene en su cartera desde hace varios años el Instituto Costarricense de Ferrocarriles (Incofer).
No obstante, las cuatro iniciativas han tenido idas y venidas, atrasos, cambios de diseño y la institución ha desechado propuestas, lo que ha hecho que ninguna de ellas se haya concretado. Mientras tanto, en la GAM sigue operando un servicio que data del reinicio del tren en 2008, con algunos trenes modernos y nuevas extensiones, al tiempo que en otras zonas del país la vía férrea se deteriora o borra entre invasiones humanas y de la naturaleza.
En entrevista reciente con EF, el presidente ejecutivo del incofer, Álvaro Bermúdez, quien dirige la entidad desde marzo de este año, aseguró que su gestión se ha enfocado en “optimizar” los proyectos heredados, pero reconoció que existen pocos recursos para sacarlos adelante. La siguiente es la situación de las cuatro iniciativas.
Tren eléctrico de la GAM
El gobierno de Rodrigo Chaves descartó continuar con el proyecto de tren eléctrico que heredó de la administración del exmandatario Carlos Alvarado.
El expresidente del Incofer, Mario Arce, propuso entonces retomar la idea que dejó el gobierno del también exmandatario Luis Guillermo Solís, que consistía en un tren principalmente elevado, en viaducto. Habló de construir una primera línea entre San José y Cartago por $700 millones.
No obstante, la buena química entre Arce y el Poder Ejecutivo terminó cuando el presidente Chaves lo destituyó de su puesto y la propuesta quedó en el aire.
El actual jerarca del Instituto aseguró que el proyecto de tren elevado está también descartado, principalmente por su costo.
“El proyecto de Mario Arce era solo a Cartago, totalmente elevado, pero ¿qué pasa con Heredia, Alajuela, San José? No las estaba contemplando en ese proyecto. Hemos pensado que con un costo de lo que él iba a hacer San José - Cartago podemos hacer prácticamente toda la línea entre Cartago, Paraíso, San José, Heredia y Alajuela”, argumentó Bermúdez.
LEA MÁS: Incofer da viraje y pone su mira en una red de carga de 1.100 km que une puertos con fronteras
Además, Bermúdez criticó que la demanda de pasajeros estaba sobreestimada, lo que requería frecuencia de trenes cada cinco minutos.
Una vez más, el Incofer rediseñará el tren eléctrico, aunque tomando como base estudios de propuestas anteriores, principalmente la de la administración Alvarado.
El Incofer propone esta vez un tren eléctrico mayoritariamente a nivel de calle y con pasos elevados en las intersecciones más transitadas, como las de la banda de Circunvalación.
La demanda se reajustó a 100.000 pasajeros, lo que llevaría a una frecuencia de trenes cada 20 minutos, con la intención de evitar congestión vehicular.
Ambas modificaciones reducirán el costo del proyecto hasta un rango entre $700 y $800 millones, aunque el monto final aún se desconoce y dependerá de los estudios.
También se descarta que la primera línea a construir sea hacia Cartago, algo que para Bermúdez era un “error conceptual”.
El jerarca afirmó que a más tardar al tercer trimestre del 2024 tendrán los estudios avanzados y la expectativa es iniciar la construcción antes de que finalice este gobierno, aunque no existe total certeza.
“De aquí a los próximos meses vamos a tener la plena seguridad de si se van a poder tener los recursos para poder financiar este proyecto (...). Cuando amarremos la parte financiera, sí podemos decir ‘vamos a construir este proyecto’”, comentó Bermúdez.
Telca
El Telca es otro de los proyectos que ha estado en el tintero sin ver la luz aún. Esta se trata de un tren de carga que conectará San Carlos con Moín, usando parte de línea férrea existente y nueva.
Para la primera etapa del Telca, se deben añadir 26 km a los 96 km existentes para llevar el tren hasta Río Frío. La segunda etapa sería llevar el servicio hasta San Carlos.
Bermúdez aseguró que la propuesta de su antecesor era también costosa, pues proponía una inversión de $500 millones para modernizar la vía donde hoy Incofer da servicios de carga en Limón, en esos 96 km. No obstante, Bermúdez explicó que ese monto lo han reducido a $200 millones.
Este proyecto ha llegado hasta la fase de prefactibilidad, por lo que tiene pendiente avanzar a la factibilidad y otros estudios, un trámite que podría estar listo en la primera mitad del 2024.
Incofer ha detectado que la mayor demanda del Telca estará en la segunda etapa, es decir, entre San Carlos y Río Frío. Desde Muelle de San Carlos salen por lo menos 1.000 contenedores diarios por carretera, según cálculos de la entidad.
“Si logramos hacer un proyecto que sea factible, que le genere a los exportadores e importadores un costo de transporte mucho más bajo que lo que cuesta por carretera, pasamos una proporción de 30%-40% al tren y ya el proyecto es rentable”, explicó Bermúdez.
El Telca es parte de un concepto mayor dentro del plan maestro, el cual Incofer expuso el año anterior. Básicamente consiste en una ambiciosa red de carga de 1.100 km que conecte puertos, fronteras y la GAM y cuyo desarollo tardaría más de dos décadas.
El actual jerarca del Instituto no descarta seguir con esta propuesta, pero redujo las expectativas al decir que se debe hacer “lo que sea factible y rentable para el país, y que se pueda construir en los próximos años”.
Los beneficios que obtenga Incofer por el tren de carga ayudarán a subsidir el tren de pasajeros de la GAM, aunque no por completo.
Tren al Atlántico
Bermúdez bajó las revoluciones del proyecto que tenía el Incofer para rehabilitar el tren entre San José y Limón. El principal obstáculo es el abandono de la vía.
El tramo entre Cartago y Siquirres está prácticamente desaparecido. Aunque la institución conserva el derecho de vía, existen invasiones.
Además, un tramo de 10 km está inundado por la represa del Reventazón. El Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) debe reponer dicha sección cuando el Incofer quiera desarrollar el proyecto al Atlántico.
El abandono que ha tenido la vía férrea y el diseño mismo del trayecto elevan la inversión necesaria para revivir el primer servicio de tren que tuvo Costa Rica.
“Tiene muchas curvas. Probablemente en alguna parte del recorrido hay que cambiar la vía para pasarla por otro lado (...). Si hay que construir vía nueva, hay que hacer expropiaciones”, contó el jerarca del Incofer.
El ferrocarril entre San José y Limón, terminado en 1890, aún deberá esperar para entrar de nuevo en operación.
Tren al Pacífico
Del lado del Pacífico, el panorama es más alentador. Aunque la vía férrea también presenta daños por el nulo mantenimiento y por la construcción de la ruta 27, que debilitó los terrenos aledaños a la infraestructura ferroviaria, todo apunta a que sería un proyecto más factible.
Se necesita construir al menos ocho puentes nuevos en el recorrido entre San José y Puntarenas, pero el derecho de vía se conserva y la vía férrea está menos desdibujada.
Bermúdez enfatizó en que una falencia es que ninguna administración ha hecho estudios ni planificación hacia el Pacífico; solo existe un perfil del proyecto que se está actualizando. La administración Alvarado intentó hacer un estudio de factibilidad con un grupo coreano que no llegó a concretarse.
Incofer está valorando tres posibilidades para realizar el estudio de factibilidad. El objetivo del jerarca es que este documento “quede listo o muy encaminado”.