La zona del euro cerrará este año en recesión y registrará una inflación aún elevada en 2023, en un escenario marcado por un “grado excepcional” de incertidumbre, anticipó este viernes la Comisión Europea en sus previsiones económicas del otoño boreal.
De acuerdo con la Comisión, debido a un "entorno externo más débil y condiciones financieras más estrictas", la Unión Europea (UE), la zona del euro y la mayoría de los Estados miembros entrarán en recesión en el último trimestre del año.
LEA MÁS: Inflación interanual en Costa Rica vuelve a ser de un solo dígito: 8,99% en octubre
La Comisión --brazo ejecutivo de la UE-- señaló que luego de un desempeño sólido en el primer semestre de este año, la economía del bloque "ha ingresado en una fase mucho más desafiante".
El bloque europeo es severamente afectado por su "proximidad geográfica" con el conflicto armado en Ucrania, y su "pesada dependencia de las importaciones de gas desde Rusia".
El informe prevé que la contracción de la actividad económica "continuará en el primer trimestre de 2023". Pero probablemente el crecimiento regresará a Europa en la primavera, señala el texto.
Sin embargo, apuntó que "poderosos vientos en contra" que frenan la demanda, harán que esa retomada de la actividad económica sea muy moderada.
LEA MÁS: Economía de la Eurozona registra clara desaceleración y alcanzó inflación récord en octubre
Para el 2023, la Comisión ahora proyecta un crecimiento económico de apenas 0,3%. En su informe anterior, publicado en julio, había previsto un avance de 1,5%.
En octubre, el Banco Central Europeo había advertido que una recesión en el bloque era inminente.
Este panorama se ve agravado por la persistencia de una elevada inflación.
La Comisión proyectó que la zona del euro experimentará una mejora apenas relativa pero que la inflación se mantendrá marcadamente elevada en el próximo año.
La trayectoria de la inflación se situará en 6,1%, según la Comisión, un reajuste al alza de más de dos puntos porcentuales con relación a los pronósticos de julio (4%).
La Comisión destacó que esta perspectiva económica se mantiene "rodeada de un grado excepcional de incertidumbre" a raíz de la ofensiva de Rusia contra Ucrania.
"La mayor amenaza proviene de la evolución adversa del mercado del gas y el riesgo de escasez, especialmente en el invierno de 2023-24", indicó.
Para el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, "la economía de la UE está en un punto de inflexión". "Tenemos unos meses difíciles por delante", agregó.
El funcionario italiano recordó que en el primer trimestre de 2022 la economía de la UE creció 0,7%, desempeño que repitió en el segundo trimestre para desacelerar a 0,2% en el tercero.
Sin embargo, añadió, la fuerza que impulsó la recuperación económica pospandemia "en gran medida se desvaneció", al tiempo que se tornaron determinantes los efectos de la guerra en Ucrania y "una amplia desaceleración de la demanda externa".
Entre las principales economías de la UE, la Comisión proyectó para Alemania un crecimiento de apenas 1,6% en 2022, que para Francia sería de 2,6% y para Italia de 3,8%. España, en tanto, debería exhibir un 4,5%.
En tanto, el índice de inflación cerraría 2022 en Alemania en 8,8%, con un 8,5% en España, 5,8% en Francia y 8,7% en Italia.
El informe de la Comisión apunta que este escenario de inminente recesión e inflación elevada coincide con muy buenos indicadores de los niveles de empleo.