Laura Fernández Delgado, ministra de la Presidencia y figura que en corrillos políticos se visualiza como una de las posibles cartas del oficialismo de cara a las elecciones presidenciales de 2026, asegura que planea mantenerse en el cargo por lo que resta del cuatrienio o bien, hasta que el presidente Rodrigo Chaves le pida lo contrario.
La jerarca respondió de esta forma ante una serie de consultas realizadas por EF desde el 30 de julio, para un perfil sobre el reciente ascenso de la jerarca en el escenario político costarricense, las cuales fueron recibidas de forma tardía para dicha publicación.
Fernández, sin embargo, evitó descartar la posibilidad de que termine buscando un puesto de elección popular en los próximos comicios.
“Las responsabilidades al frente del Ministerio de la Presidencia y del Ministerio de Planificación Nacional y Política Económica demandan absolutamente todo mi tiempo laboral y atención”, aseguró. Pero añadió: “Los proyectos, planes y trabajo del futuro siempre los dejo en manos de Dios”.
Relaciones con terceros
La ministra también se refirió a su relación con el presidente Rodrigo Chaves, con la oposición y con la prensa.
Sobre el mandatario, aseguró guardarle “profunda admiración y respeto”. “Es para mí un privilegio trabajar a su lado, aprendo muchísimo de él. Es un ser humano extraordinario, un gran jefe y líder, una persona sumamente inteligente y entregada a nuestro país”, añadió.
En cuanto a la oposición, aseguró que su relación “es muy buena”, que siempre está a “a un WhatsApp de distancia de cualquier diputado de oposición u oficialista”; mientras que, en cuanto a la prensa, recordó que “con gran frecuencia” atiende “consultas, entrevistas o solicitudes de información para reportajes”, aunque dice ver desinformación, mentira y tergiversación en el ambiente.
Fernández asumió el Ministerio de la Presidencia el 21 de junio pasado, tras la salida por renuncia de la exministra Natalia Díaz. Desde entonces, además de esa cartera, se mantiene como jerarca interina de Planificación.
La ley jaguar y otras prioridades
Consultada sobre sus prioridades para la gestión en el Ministerio de la Presidencia, la jerarca no escatimó en ponerse metas.
Una de las principales que mencionó fue “impulsar en toda la medida posible la aprobación legislativa para el referéndum de la ley jaguar”, el proyecto de ley que el Poder Ejecutivo planea llevar a consulta ciudadana y sobre el cual recientemente anunció una nueva versión.
La Sala Constitucional encontró múltiples vicios en cuatro de sus nueve artículos del proyecto original, entre otras cuestiones, por “suprimir la competencia (de la Contraloría) de garantizar la eficiencia en el manejo de los fondos públicos”.
Asimismo, la jerarca manifestó su interés de impulsar en el Congreso proyectos de ley prioritarios, entre los cuales mencionó reformas administrativas del Estado, el proyecto de modernización del mercado eléctrico (que implicaría una apertura del mercado de generación) y la apertura para aplicar jornadas flexibles 4x3. También mencionó temas como “pensiones de lujo, desarrollo de infraestructura pública como Limonal -Barranca, puentes sobre la Ruta 32 a Limón, entre otros”, aunque no hizo alusión a los expedientes legislativos específicos.
Qué tanto pueda avanzar en estos campos dependerá de su eficiencia en el cargo, pero también de cuánto tiempo finalmente permanezca en él.
Ese tiempo puede ser hasta un año y medio, si finalmente concluye el cuatrienio del actual gobierno en Zapote o bien, solo seis meses más, si finalmente emprende una carrera por la Presidencia de la República en las elecciones de 2026. La Constitución Política impide aspirar a la Presidencia a aquellas personas que desempeñaron un puesto de ministro o ministra de la República en los últimos 12 meses antes de las elecciones. Es decir, para aspirar a un cargo de esa categoría, un jerarca debe renunciar un año antes de los comicios.
Trabajo en Mideplan
En cuanto a su legado en el Mideplán, hasta este momento, la ministra aseguró observar dos principales logros.
Uno, dijo, es la regionalización del Plan Nacional de Desarrollo e Inversiones Públicas del país (PND). “Ahora se planifica, presupuesta y gestionan inversiones desagregadas en las regiones”.
Otro, añadió, fue la implementación de la Ley Marco de Empleo Público, aprobada en el gobierno anterior, pero puesta en marcha durante esta administración. “Con este nuevo modelo salarial se superará el modelo de pluses que generó que crecimientos ‘automáticos’ de los salarios y descontrol de las finanzas públicas”, subrayó.
Fernández es una cara relativamente nueva en la vitrina principal de política costarricense. Por varios años fue funcionaria del Mideplán como asesora de despachos ministeriales y como investigadora. Asimismo, trabajó como asesora legislativa del exdiputado Mario Redondo, del Partido Alianza Demócrata Cristiana (PADC), entre 2014 y 2018; y luego fue su directora de Planeamiento Estratégico y jefa de despacho en la Municipalidad de Cartago, entre junio de 2020 y enero de 2022.
En un evento poco recordado, también aspiró por una diputación en 2018, aunque no tuvo éxito. En aquel año ocupó el primer puesto en la lista del partido de Redondo por San José, pero la agrupación solo obtuvo un 1,7% de los votos en la provincia.
Con ese currículo, finalmente fue seleccionada por el presidente Rodrigo Chaves y su exministra de la Presidencia, Natalia Díaz, para dirigir el Mideplán a partir de 2022. Para ello, participó en un proceso de reclutamiento organizado por Díaz, con entrevistas. Desde entonces desempeña el máximo cargo de esa cartera y, recién el 21 de junio pasado, relevó a Díaz tras su salida por renuncia.