El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) se prepara para la tercera elección municipal separada de las presidenciales. Desde el 2016, la votación para los puestos de alcaldía, regiduría, síndicos, concejalías e intendencias se realizan a mitad del periodo presidencial.
El TSE ha tenido que sacurdise de la crítica por la separación de los comicios y mantiene su rechazo a la propuesta de la diputada Carolina Delgado, del partido Liberación Nacional, y el diputado Alejandro Pacheco, de Unidad Social Cristiana, que plantea unificar nuevamente las elecciones. De momento la iniciativa es analizada en la Comisión de Reformas Electorales.
Luis Diego Brenes, magistrado del TSE, calificó de “simplista” la idea de unificar las elecciones y aseguró que es necesario que la votación por los puestos municipales tenga autonomía de las presidenciales.
Este tema, el abstencionismo (el supera el 60%) y el manejo electoral en cantones que por primera vez tendrán alcaldía fueron los temás que Brenes conversó con EF durante una entrevista.
El abstencionismo es alto en estas elecciones, ¿por qué no volverlas a unir con las presidenciales?
Es cierto que la elección nacional tiende a atraer a un mayor número de personas y una participación electoral política más alta, pero respecto a la elección municipal hay datos que llaman la atención: desde el 2002 a la fecha la participación electoral ha crecido. La primera eleccion municipal que fue en diciembre del 2002 tuvo una participación de un 22,8% y la de febrero del 2020 subió a un 36,3%.
El tema de unificar o no la elección municipal con la elección nacional es un tema muy simplista a propósito de aumentar la participación electoral. En lo nacional hemos encontrado una disminución de la participación. La apatía con la política y la situación económica país son variables multicausales que pueden estár presentes en una elección municipal, pero también en una elección nacional. Una elección nacional (unificada) no implica que se vaya a tener más participación.
La preocupación del organismo electoral pasa más por la necesaria autonomía que se requiere con las municipalidades como estructuras políticas descentralizadas. Les queremos dar importancia. En este caso tiene sentido que la elección sea aparte de la presidencial para evitar lo que en ciencia política se conoce como un ‘efecto arrastre’, y es que en la elección nacional era menor el interés en los cargos municipales.
“Desde la ciencia política se habla de un abstencionismo técnico y otro que es político. Estimamos que desde la administración electoral no colaboramos con ese abstencionismo técnico porque procuramos juntas receptoras de votos lo más cerca de la ciudadanía”
— Luis Diego Brenes, magistrado TSE.
¿La inversión podría disminuir si se unifican?
Acumular estas dos elecciones podría generar mayores gastos porque el evento se hace muchísimo más complejo logísticamente.
Le pongo un dato muy puntual. El tiempo que requiere el elector para votar es mayor por la cantidad de información y de papeletas que se requieren. Esto obligaría al TSE a revisar el total de juntas receptoras de votos y tendría que ampliar ese número de juntas. Esto requiere de más auxiliares electorales por parte del TSE.
El escrutinio tiene plazos muy reducidos y si estamos en una mega elección tengo mis reservas de que podamos cumplir en tiempo con la obligacion legal de esos plazos. Probablemente tendríamos que incrementar los tiempos de escrutinio. No tengo el dato, pero cuidado termina siendo más costosa esta unificación de la elección que se plantea.
¿Entonces la separación ha tenido éxito?
Para mí el éxito ha estado en visibilizar, en traer la importancia merecida que requieren nuestras municipalidades como estructuras públicas de descentralización territorial. Cuando las autoridades municipales se escogían con las nacionales quedaban invisibilizadas y lo que se producía era un efecto de voto arrastre a las candidaturas nacionales.
Si uno piensa en entremezclar la campaña electoral de presidencia con diputaciones y con la elección municipal podríamos estar en un plano de desigualdad en información que se requiere por los plazos que se establecen. Esta es una valoración técnica: los partidos políticos cantonales no tienen derecho a deuda política como tal, a propósito de bonos de deuda política, entonces podríamos estar hablando de desigualdad.
¿Varía de alguna manera la logística en los cantones que tendrán elecciones por primera vez?
Se incluyen dos cantones nuevos que son Monteverde y Puerto Jiménez. En realidad la logística electoral en estos cantones no varía en lo absoluto respecto a los otros más allá de la motivación propia que puedan tener a propósito de que ahora no escogen únicamente concejalías de distrito y sindicaturas, sino ahora también elegirán alcaldías y regidurías.
Uno pensaría que por la novedad va a existir efervescencia en estos dos cantones para presentarse a las urnas, pero el abstencionismo es un fenómeno multicausal. El tribunal no se plantea esas variables, el tribunal a lo que se dedica es a llevar las juntas lo más cercano posible a todos electores y preparar el material al 100% para que sea el 100% de la ciudadanía que participe.