Desde la invasión a Ucrania, los precios de las materias primas agrícolas como el trigo, la soya y el maíz, llegaron a máximos que no se veían desde hace décadas. No obstante, la segunda mitad de este 2022 podría traer en un respiro para los productores locales y los bolsillos de los consumidores.
Los recientes movimientos en las bolsas de futuros evidencian que los precios presentan una ligera tendencia a la baja. ¿Qué podría estar causando este alivio? Básicamente dos factores puntuales: la oferta con buenas condiciones climáticas y las negociaciones entre Rusia y Ucrania, aunque siguen siendo frágiles e inestables.
Luis Ruenes, director general de Molinos de Costa Rica dijo a EF que la empresa aprovechó esta baja para decidir no “tocar” más el precio de la harina por lo que resta del año. Molinos de Costa Rica ha hecho dos ajustes al alza en el precio de sus productos en este 2022. El último fue del 10%.
“Les garantizamos que el precio no va a subir en lo queda del año, es más, si la situación sigue bien en el último trimestre (setiembre, octubre, noviembre, diciembre) veríamos una baja en el precio de la harina”, precisó Ruenes, cuya compañía ya accedió a contratos para suplir sus necesidades de lo que resta del año.
Según el medio Bloomberg Línea, los precios internacionales del trigo, el maíz y la soya han caído desde sus máximos.
¿Qué se espera?
Para este segundo semestre, se avecina un aumento de la oferta con el inicio de las cosechas de trigo en el hemisferio norte, así como las cosechas de maíz y la soya más adelante.
Si no hay eventos climáticos adversos, la producción podría aumentar, ya que los agricultores están plantando más en respuesta a los elevados precios, explicó Bloomberg Línea.
Esta es una preocupación que comparten Ruenes y Juan Carlos Sandoval, gerente general de La Maquila Lama, especialmente por las recientes ondas de calor que azotan a Europa y Estados Unidos y que están aumentando en frecuencia e intensidad. Por ahora, no se ha reportado una afectación directa en las cosechas.
Entre otras inquietudes se encuentran algún rebrote de la pandemia que obligue a cerrar algún puerto, como ya ha sucedido en China, por ejemplo.
LEA MÁS: ¿Subirá el precio del pan en Costa Rica? El segundo productor mundial de trigo cierra exportaciones
Por otra parte, las negociaciones para abrir corredores marítimos y sacar 20 millones de toneladas de cereales de Ucrania avanzan. Rusia y Ucrania representan el 30% del comercio mundial de trigo.
Las negociaciones arrancaron a principios de junio con la mediación de Turquía. Estas conversaciones son cruciales porque ningún otro país productor ha logrado hasta ahora paliar el desplome de las exportaciones ucranianas (25 millones de toneladas inicialmente), en un mercado que ya estaba muy afectado por el alza de los precios de materias primas antes del estallido del conflicto.
Las negociaciones entre Rusia y Ucrania derivaron en un acuerdo entre ambas partes para desbloquear el desembarque de las 20 toneladas de trigo varadas y otras exportaciones; sin embargo, las dudas sobre su fortaleza son altas. Ucrania recién acusó este sábado a Rusia de lanzar misiles contra Odesa, el puerto estratégico ucraniano. Nada es seguro.
Consultado antes de esta situación, Sandoval consideraba que la etapa más crítica de la situación ya pasó, que muchos países habían subido sus inventarios de materias primas y ya estaban estabilizando sus compras. Sin embargo, todavía se ve inestabilidad en el ambiente.
“Hay que seguir muy de cerca los movimientos de precios internacionales y continuar manteniendo inventarios de materias primas más alto de lo normal para poder reaccionar ante una crisis”, advirtió desde entonces.
Este es el caso de Molinos de Costa Rica, que utiliza el mercado de contratos a futuro para tratar de mitigar el impacto en el bolsillo de los consumidores, ya se garantiza suplir la demanda hasta fines de 2022.
LEA MÁS: Productores locales ya resienten la escalada en los precios de las materias primas agrícolas
¿Un respiro al bolsillo?
Desde los productos de origen animal como la carne de res, de cerdo, el pollo, los huevos, la leche y sus derivados, hasta el pan, la repostería, las galletas y pastas, podrían beneficiarse si el escenario que se prevé para el resto del año, se cumple.
Molinos de Costa Rica y La Maquila Lama afirman que han implementado, en lo posible, medidas para no trasladar los costos al consumidor.
La Cámara Costarricense de la Industria Alimentaria (CACIA) señala que en estos momentos hay mucha incertidumbre.
El conflicto, los embates climáticos de Norte y Suramérica, las complicaciones en las cadenas de logística internacional y otras variables que mueven las cotizaciones internacionales parecen ser una situación con la que se seguirá lidiando, precisó Mario Montero, vicepresidente ejecutivo de Cacia.
“La atención de los productores nacionales y de todas las instancias de administración del comercio deben estar totalmente concentrados en el replanteamiento de procedimientos administrativos que encarecen el ingreso de insumos y materias primas para la producción nacional, por ejemplo, los procedimientos y lugares físicos de los muestreos para el cumplimiento de estándares sanitarios”, indicó Montero.
Hacia atrás
En mayo, India, el segundo productor mundial de trigo, cerró sus exportaciones. La Dirección General de Comercio del país dio a conocer la prohibición de las exportaciones de trigo con las que contaba el mundo para satisfacer la demanda global, con el argumento de que la seguridad alimentaria de la nación y los países vecinos y vulnerables, se encontraba amenazada.
Costa Rica es un importador de materias primas, y pese a que el país se abastece principalmente de Estados Unidos, Canadá, Centroamérica y Sudamérica, datos del Departamento de Agricultura de Estados Unidos citados por el The Wall Street Journal, evidencian que los suelos ricos en nutrientes de Ucrania producen el 10% de las exportaciones mundiales de trigo. Asimismo, unidos Rusia y Ucrania abastecen el 30% del mercado mundial.
Al cerrarse estos mercados por la guerra, India estaba supliendo las exportaciones de Ucrania en alguna medida.
Esto quiere decir que, la ausencia de tres grandes participantes en el mercado de granos y cereales básicos (trigo, maíz, soya) aumenta la competencia entre países por los inventarios disponibles y genera un alza en los precios para los compradores.