El Sistema Nacional de Colegios Científicos de Costa Rica (SNCCCR) recibió con sorpresa el monto de la partida asignada por el Ministerio de Hacienda para el año 2025 dentro del proyecto de Presupuesto Nacional, presentado el viernes 30 de agosto a la Asamblea Legislativa.
Ese día, el sistema educativo supo del monto con el que tendrá que trabajar el próximo año. El SNCCCR recibirá casi ¢2.641 millones en 2025, ¢140 millones más que este año. No obstante, 10 de las 11 sedes actualmente en operación sufrirán recortes.
Esta asignación se dio a pesar de que el conjunto de colegios científicos presentó en abril, como cada año, el anteproyecto de presupuesto, que generalmente recibe el visto bueno. Sin embargo, la partida prevista por Hacienda dista de ese esquema preliminar.
Por ejemplo, la sede de Alajuela solicitó una suma superior a ¢300 millones, ¢50 millones más que este año en vista pues espera un aumento de la matrícula que implica contratar más personal. Por el contrario, recibirá ¢216 millones, lo que hace imposible esa expansión de su población.
El colegio científico de San Pedro de Montes de Oca es el que pierde más financiamiento en términos absolutos, con una disminución de ¢40 millones. Esa sede y otras cinco tendrán que operar con un 13,3% menos de presupuesto.
Las sedes de San Carlos, Liberia y Puntarenas percibirán un 11,7% menos, lo que representa reducciones de entre ¢20 millones y ¢23 millones. Por su parte, la sede de Cartago es la que menos recorte tendrá, con un 5% a la baja.
La sede de Parrita es la única que aumenta su presupuesto. Esto se debe a que abrió este año con un grupo de décimo, cuyos estudiantes pasarán a undécimo en 2025, lo que significa que contará ahora con una sección de cada nivel.
Otras tres sedes que serán inauguradas en 2025 tendrán su primer presupuesto. Se trata de Tarrazú, Upala y Puriscal, que obtendrán entre ¢128 millones y ¢136 millones.
El SNCCCR debió entregar el martes 3 de setiembre su plan anual de trabajo para el 2025 ajustado al nuevo presupuesto, lo que echó por la borda el plan elaborado semanas antes con base en el financiamiento esperado según el anteproyecto.
Johanna Salazar, directora del sistema de colegios científicos, aseguró que el recorte implica un grave retroceso que impactará el funcionamiento de estas instituciones. Algunos colegios que planeaban ampliar matrícula ya no lo podrán hacer y se verán afectados también los sistemas de becas, cursos de reforzamiento, mantenimiento de los colegios con instalaciones propias e incluso prevén despedir personal.
“La afectación que vamos a tener es irreversible. Tenemos que hacer frente a esto sin perder la esperanza de que en algún momento puede mejorar, pero no va a ser para el próximo año”, aseveró la funcionaria.
Diferencia de argumentos
Salazar refutó los argumentos del ministro de Hacienda, Nogui Acosta, con los que justificó el recorte a los 10 colegios científicos.
De acuerdo al diario La Nación, Acosta alegó que la ejecución presupuestaria de estos centros educativos en el 2023 estuvo entre un 85% y un 88%, lo que permitió realizar ajustes para financiar la apertura de los tres nuevos colegios científicos en el 2025.
Sin embargo, la directora del sistema mencionó que es un tema delicado que se debe ver con lupa y no a grosso modo. En ocasiones, según dijo, existen recursos que quedan en reserva, como prestaciones legales, y otros que guardan para ejecutar en el periodo siguiente.
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Salazar aclaró que, cuando se dio la noticia de la apertura de cinco nuevas sedes el año pasado, no se les advirtió que sería a costas de los demás colegios, aunque el recorte presupuestario era un temor existente.
En estas condiciones, la posibilidad de expandir más el sistema, con propuestas como abrir más cupos o duplicar la cantidad de colegios, está más lejos que nunca. Por el contrario, desean realizar inversiones para fortalecer los actuales colegios, aunque el recorte presupuestario complica el panorama.
Un caso de ello es que las instituciones de Alajuela, San Ramón, Ciudad Quesada, Pérez Zeledón y Limón tienen en mente la construcción de sus propios espacios, pero la falta de presupuesto hace que el diseño quede, por lo pronto, en el papel.
“Cómo es posible que se nos esté castigando a los colegios que lideran el ingreso a las universidades públicas”.
— Johanna Salazar, directora del SNCCCR.
Las solicitudes para ingresar a un colegio de este sistema rebasan los cupos disponibles. Según información publicada por EF en agosto, para la admisión del 2024 se presentaron 977 estudiantes, pero se ofrecen menos de 500 espacios. Este conjunto de instituciones educativas han alcanzado prestigio debido a que muchos de sus estudiantes destacan año tras año en la admisión a las universidades públicas, donde obtienen las notas más altas.
El Presupuesto Nacional está en manos de la Asamblea Legislativa, la cua tiene dos meses para discutirlo, modificarlo y aprobarlo. Si bien el sistema de colegios científicos ha recibido el apoyo de algunos diputados, aumentar el presupuesto asignado parece difícil.