"Es una propuesta que estamos elaborando por la urgencia que tenemos de tener una evaluación respetable socialmente. Somos conscientes de que la evaluación que hacemos no merece ningún respeto de la sociedad. No representa una garantía para los padres de familia de que el funcionario del MEP que está interactuando con su hijo sea el idóneo. Eso nos preocupa muchísimo", declaró el ministro de Educación.