La actividad de construcción en el país acumula 25 meses de variaciones negativas respecto a su actividad económica; es así una de las actividades más afectadas por la pandemia, aunque desde antes de la llegada del COVID-19 al país ya presentaba señales de recesión.
Así lo indica el último reporte del Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE), publicado por el Banco Central de Costa Rica (BCCR).
En el caso de la construcción con destino privado, afectó la menor edificación de viviendas (interés social, clase media y de clase alta) y de obra no residencial (bodegas, locales comerciales y parqueos). Sin embargo, en diciembre aumentó la construcción de naves industriales y de torres de apartamentos y oficinas.
Por otro lado, según informó el Banco Central, la construcción con destino público decreció por la reducción de presupuestos para construcción de las entidades públicas, particularmente del Instituto Costarricense de Electricidad, las municipalidades, el Fideicomiso de Infraestructura Educativa y del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA).
Ante la situación del sector, la Cámara Costarricense de la Construcción (CCC) ha solicitado múltiples veces al Gobierno acciones como la facilitación del acceso al crédito para construcción, impulsar la inversión en obra pública y acelerar la mejora regulatoria para la actividad.
Durante el 2020, los metros cuadrados tramitados ante el Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA) mostraron un decrecimiento de 25,9% con respecto al 2019, su nivel más bajo desde el 2011.
Pese a esto, la CCC espera que el 2021 sea clave para la reactivación económica del país y por ende de la actividad. Eso sí, aunque el Central proyecta un crecimiento de 1,8% para el sector, la Cámara aseguró que es insuficiente para retomar los niveles de actividad anteriores a 2019.
Producción nacional
En diciembre de 2020 la actividad económica de Costa Rica decreció 4,7% en términos interanuales.
La evolución por actividades económicas es variada. En diciembre de 2020, la manufactura así como los servicios empresariales y los informáticos incrementaron su producción en términos interanuales (1,4%, 0,3% y 1,8%, respectivamente).
Por el contrario, el resto de las actividades económicas disminuyeron su nivel de actividad. El de mayor disminución fue construcción. La actividad agropecuaria, por su parte, decreció 2,4% respecto a diciembre 2019, principalmente por la menor producción de piña, café y azúcar.