Fitch Ratings subió este miércoles 28 de febrero la calificación de la deuda soberana costarricense de BB- a BB, con perspectiva estable. Costa Rica no tenía esta calificación desde enero de 2018.
La agencia calificadora, una de las más grandes del mundo, justificó la mejora en el acatamiento que el país le ha dado a la regla fiscal (aprobada en 2018), la cual está “anclando una mejora estructural continua en la posición fiscal de Costa Rica, así como un crecimiento económico sólido y una mejor posición de liquidez externa”, según se lee en el comunicado oficial.
Esta regla también ha ayudado a encaminar una disminución continua en la deuda del gobierno.
Fitch Ratings también resaltó el crecimiento mayor al esperado en 2023, la mejora en la balanza de pagos, unas reservas monetarias más robustas
La mejora de Fitch se suma a la que hicieron S&P Global Ratings y Moody’s en octubre y noviembre del 2023, en las que la calificación pasó de B+ a BB- con perspectiva estable y de B2 a B1 con perspectiva positiva, respectivamente.
Unas calificaciones más positivas pueden ayudar al país ha obtener mejores condiciones en los mercados internacionales por su deuda soberana, un elemento positivo cuando se toma en cuenta que el país tiene la luz verde para emitir eurobonos por $1.000 millones en este 2024.
“Estas mejoras tendrán que ser sostenidas en el tiempo con el compromiso de todos y todas, porque del esfuerzo conjunto que hagamos hoy, dependerán los frutos que recogeremos mañana. Desde el Ministerio de Hacienda mantenemos nuestro compromiso con la sostenibilidad de las finanzas públicas, pero es preciso que los demás de actores políticos también se comprometan con ello”, dijo Nogui Acosta, ministro de Hacienda, por medio de un comunicado de prensa.