Durante la penúltima semana del mes de abril los montos diarios negociados en el Monex alcanzaron los $33,74 millones. Sin embargo, el Banco Central de Costa Rica no ha hecho ninguna operación de compra o venta para la estabilización de la divisa.
El pasado lunes 19 de abril el mercado abrió con un tipo de cambio promedio de ¢614,94, una de las cifras más altas en lo que iba de este 2021, por ende al abrir el mercado de negociación no fue extraño ver una gran participación de parte de los intermediarios -a excepción del Central- de manera que para el cierre de sesión el monto negociado superó los $30 millones.
Al día siguiente la situación se mantuvo similar y hubo gran actividad en el mercado de intercambio de divisas de manera que al ser la 1 p.m. cuando se concluyó la sesión la cifra total correspondiente a la negociación fue de $29,50 millones y el tipo de cambio promedio era de ¢616,13, es decir, una vez más retomaba su senda al alza.
La actividad en el Monex persistió a lo largo de la semana y para el viernes se había negociado un total de $101,8 millones.
Pese a que son cifras un poco más elevadas de las sumas más usuales de negociación, esta no representa el monto récord. El 12 de enero en el mercado de divisas se llegaron a negociar $44,8 millones en un solo día.
Tipo de cambio
El dólar también alcanzó su nuevo precio máximo interanual y este viernes 23 de abril cerró en ¢617,01. Esta es la cifra más alta en el Monex desde el 6 de noviembre del 2018 donde la divisa llegó a alcanzar los ¢628.
Durante el 2020 pese a la incertidumbre causada por la pandemia y los posibles acuerdos o desacuerdos con organismos multilaterales el precio del dólar ‘tocó techo’ en ¢614 durante noviembre, desde entonces se mantuvo entre ¢610 y ¢615 hasta este viernes cuando llegó a su precio máximo interanual.
Por su parte el tipo de cambio de referencia para la venta es de ¢619,10 y en el caso de la compra corresponde a ¢611,52.
Los intermediarios financieros ofrecen la divisa entre ¢620 y ¢624. El Banco Cathay de Costa Rica y CMB son las entidades con la venta de divisa más costosa ¢624 para ser exactos, mientras que el Banco Nacional, Banco Popular, Prival Bank y Bac San José tiene el menor precio en ventanilla con ¢622
Presiones de demanda
El pasado 30 marzo, Amedeo Gaggion, director de Tesorería de Scotiabank, aseguró que el principal movimiento al que habrá que prestarle atención es a la resoluciones en el Congreso con respecto a temas relacionados con la aprobación del crédito del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el proceso con el que ingresen divisas al país.
Es decir, será determinante la velocidad con la que se aprueben los créditos multilaterales para el país, además de la posible incertidumbre que se pueda generar en el mercado cambiario con la compra de dólares por parte del Gobierno Central para el pago de sus obligaciones.
“La velocidad en el que esto (cambio de dólares a colones de préstamos) se haga será fundamental en la apreciación del tipo de cambio”, agregó Gaggión.
Ese proceso sigue en pausa debido al alto número de mociones presentados por los diputados y los recientes casos positivos de COVID-19.
El especialista también explicó que la depreciación del colón, depende de aspectos como una resolución negativa en las negociaciones con el FMI, insuficiente control del gasto público y por tanto un elevado déficit fiscal, menor apetito de los inversionistas por los bonos de Hacienda o menor Inversión Extranjera Directa (IED), un incremento en los impuestos en detrimento del crecimiento económico y la inversión o recrudecimiento de los cierres de negocios y mayores restricciones de movilidad por aumento acelerado en el contagio de COVID, lo que implica menos ingresos y mayores gastos para el Gobierno.
Por el lado de la apreciación, el colón podrá tomar aún más valor frente al dólar por un mayor dinamismo económico, el cual se verá reflejado en una mejora en la recaudación tributaria.
Un aumento en el fondeo externo a través de créditos multilaterales y Eurobonos, ayudarían a una rápida reconversión de la deuda contraída en dólares por parte de Hacienda y un mayor flujo de divisas.