Finanzas

Perderlo todo de la noche a la mañana: el cierre de las financieras en 1987

El dinero fácil no existe. Entre 1987 y 1988, miles de costarricenses invirtieron en alguna entidad financiera todo o gran parte de su dinero, y no lograron recuperar ni un solo colón cuando las instituciones cayeron en quiebra.

EscucharEscuchar

Hubo costarricenses que lo perdieron todo. Su sustento, su modo de vida. Un ejemplo es el testimonio de Liduvina Rodríguez: “Eran como ¢60.000. Me los dejó mi esposo al morir, hace seis años. Esa platilla la metí en Cofidesa y con el pago de los intereses vivía. Ahora no sé qué voy a hacer (por el cierre de la financiera). Eso era lo único que tenía”. Sus palabras las recopiló el periódico La Nación en su edición del 1.° de diciembre de 1987.








Mónica Cerdas Gómez

Mónica Cerdas Gómez

Periodista de Finanzas en El Financiero. Graduada en Periodismo de la Universidad Latina de Costa Rica. Ganadora del Premio Periodismo Bursátil 2022, de la Bolsa Nacional de Valores. Recibió mención honorífica de excelencia de El Financiero, en 2022.

En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.