El más reciente Informe del Estado de la Nación 2021 señala que los cambios normativos desarrollados en el sistema financiero nacional por motivo de la pandemia evitan de forma artificial y temporal que los balances de los bancos sufran un mayor deterioro.
La contracción del consumo de los hogares y la inversión limitaron la capacidad de pago de los principales actores económicos, por lo que las entidades bancarias enfrentaron un aumento en el riesgo de crédito. Ante esto, las autoridades del sector financiero promovieron medidas normativas temporales para mitigar el golpe de la pandemia en el sistema financiero y el aumento de la mora, como prórrogas y readecuaciones de los créditos.
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Sin embargo, según señala el informe, el impacto real de la pandemia sobre el sistema bancario “aún no se observa plenamente pues su transmisión está en desarrollo, y porque las medidas de flexibilidad normativa han permitido mitigar o postergar el golpe sobre los balances de los intermediarios”.
“Los problemas de fondo que se profundizaron con la pandemia en relación con los riesgos de crédito y la morosidad no han sido corregidos, por el contrario, han sido pospuestos”, señala el informe.
La superintendente de entidades financieras, Rocío Aguilar, expuso el pasado 29 de octubre que en el 2022, cuando se eliminen las medidas de alivio completamente, la mora podría aumentar hasta a un 4% o 5%.
Medidas concluirán
Las prórrogas, readecuaciones o refinanciamientos a quienes mantenían operaciones crediticias y sufrieron afectaciones económicas acabarán a partir del 1°. de enero del 2022.
El Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif) acordó suspender la medida tomada ante la crisis que conllevó la llegada de la pandemia al país.
Alberto Dent, presidente de Conassif, especificó que a partir del primer día de enero el contador se devuelve a “cero”, es decir, aunque el cliente bancario haya sido sujeto de alguna reestructuración a finales de este 2021, para el 2022 comenzaría nuevamente la cuenta. Así, según la normativa regular, las entidades pueden realizar únicamente una renegociación cada 24 meses. Si existieran más reestructuraciones, la categoría de riesgo del cliente bancario podría verse afectada.
El otro cambio que se experimentará a partir de inicios del 2022 será que las entidades financieras supervisadas deberán retomar los análisis de estrés al estudiar las capacidades de pago de sus clientes, un requisito que se había suspendido como parte de las medidas adoptadas durante el 2020.