Al llegar estas fechas, vale la pena preguntarse ¿cuán cómodo se siente usted al tomarse tiempo libre? Lo hace porque “debe hacerlo” o porque realmente considera que es algo vital para su equilibrio profesional y personal?
Actualmente, vivimos en un mundo muy acelerado en el que los ámbitos laborales competitivos muchas veces permean la forma en cómo administramos nuestro tiempo y no permiten tener un adecuado balance entre la vida y el trabajo.
Para los empleados de culturas corporativas de alto rendimiento, realizar las aspiraciones de carrera significa, en muchas ocasiones, sacrificar su propio bienestar y el tiempo personal/familiar, por lo que la posibilidad de lograr espacios de calidad fuera del trabajo se convierte en un verdadero desafío.
Realmente se necesita convicción y práctica para afrontar nuestra propia responsabilidad de encontrar tiempo para las cosas que valoramos, no importa si se trata de pasatiempos, pasiones, ejercicio, o pasar tiempo con la familia y los amigos.
Conforme avanzan en su carrera, muchas personas tienden a pensar en el trabajo como lo único realmente “importante” y en los logros personales como algo de lo que se pueden ocupar después, cuando hayan acabado con el trabajo.
Es tiempo para pensar en una nueva escala de valores para uno mismo: esa en la que las necesidades personales, espirituales y físicas ostenten la misma trascendencia que las cosas relacionadas con el trabajo.
Identifique aquellas cosas que realmente tiene significado para usted, más allá del trabajo, y luego realice elecciones y organice su tiempo para que esas cosas importantes tengan el espacio que merecen.