Sea transparente cuando le diga a un empleado que no obtuvo el ascenso.
Es difícil decirle a un empleado que no obtuvo el ascenso que quería. su objetivo debe ser avisarle con claridad y empatía.
— Comience hablando de las contribuciones de su empleado y agradeciéndole por solicitar el ascenso. Evite comentarios incómodos como “La próxima vez lo obtendrás”, una promesa que quizá no podrá cumplir. Prepárase para explicar por qué no se lo dio. ¿Le faltó cierta experiencia, disciplina o aptitud?, por ejemplo.
— Comparta cómo tomó la decisión. Aunque el empleado no esté contento con el resultado, es importante que sepa que el proceso fue justo.
— Finalmente, termine la conversación diciendo algo así: “Me encantaría seguir hablando de sus metas profesionales, así que apartemos un momento para hablar de cómo obtendrá la experiencia necesaria para avanzar”. Después, asegúrase de darle seguimiento.
Adaptado de “How to tell an employee they didn’t get a promotion”, de Rebecca Knight.
Cuando esté en crisis, permita que tus compañeros de trabajo ayuden
Cuando esté pasando por una crisis personal, es probable que necesite el apoyo de sus colegas. Sin embargo, quizá no saben cómo ser útiles, así que pídales ayuda atenta y específicamente.
Dígales qué necesita y por qué es importante que le ayuden, y, como con cualquier petición de trabajo, deles una fecha límite. Podría decir, por ejemplo: “Me encantaría que me ayudara a lo largo de las siguientes dos semanas mientras dejo de venir para cuidar a mi madre. ¿Podría terminar el reporte en el que hemos estado trabajando para el siguiente jueves? Me despejaría la mente para enfocarme en lo que debo hacer en casa”. Las investigaciones muestran que la manera en que formula una petición influye en gran medida en que alguien acepte. Si es claro acerca de lo que necesita exactamente, será más fácil que sus colegas ayuden cuando lo requiera.
Adaptado de “What to Do When a personal crisis is hurting your professional life”, de Amy Gallo.
Para combatir el desgaste, tome el control
Cuando esté agotado y exhausto, es fácil ponerse en el papel de víctima de las circunstancias y olvidar que tiene autoridad en el asunto. En vez de culpar a todos los demás porque trabaja demasiado o está demasiado estresado, hágase responsable del problema. Piense: “Los demás han contribuido a mi situación, pero tengo la capacidad de tomar decisiones que puedan mejorar mi presente y mi futuro”. Darse cuenta de que tiene autonomía genera esperanza, lo cual permite actuar, y tomar medidas al respecto, por pequeñas que sean, refuerce su sentido de control. Tome la decisión de satisfacer sus necesidades físicas, por ejemplo. Esto podría ser tan simple como levantarte para estirar las piernas cuando sienta que ya necesita moverse, almorzar con sus compañeros en vez de hacerlo en tu escritorio o irte a la cama cuando esté cansado. Tomar la decisión de hacer todo eso demuestra que tiene algo de control, aunque sea en un nivel menor.
Adaptado de “To recover from burnout, regain your sense of control,” by Elizabeth Grace Saunders.
Durante las vacaciones, no revise su correo a menos que de verdad deba hacerlo
Cuando sale de vacaciones, lo ideal es desconectarte del trabajo por completo. Sin embargo, si alejarse de los deberes totalmente no es una opción, establezca límites para que no esté atado a su dispositivo. Haga un plan para revisar sus mensajes una vez al día en un momento específico o solo ciertos días. Deje el celular fuera de su alcance —la caja de seguridad de tu cuarto de hotel es un buen lugar— o, si quiere úselo para tomar fotos, active el modo avión. También puede reducir el número de correos que recibes dejando claro en el mensaje automático de aviso de que está fuera de la oficina que no podrán contactarte. Aunque planees echar un vistazo de vez en cuando, decirle a la gente que está disponible la predispone a esperar una respuesta. El aviso de que está fuera de la oficina te da libertad de elegir cuándo y cómo responderá (si es que lo va a hacer) mientras está de vacaciones.
Adaptado de “3 Ways to control your phone addiction on vacation”, de Regan Walsh.
¿Su lenguaje corporal transmite seguridad?
Si quiere que la gente del trabajo confíe en usted y le respete, sin importar cuál sea su título o nivel de autoridad, ponga atención a su lenguaje corporal. La manera en que está de pie, se sienta y habla afecta la apertura de las personas para que influya en ellas. Estar en posición recta con los hombros hacia atrás ayuda a transmitir seguridad y liderazgo, mientras que jorobarte y mirar tus pies tiene el efecto opuesto. Cuando te reúnas con alguien que no conoces bien, mantén tus brazos extendidos, las manos a los costados, y el torso abierto y dirigido hacia la otra persona. Esto envía el mensaje de que es abierto y confiable. Intente modular tu voz para que sea un poco más grave de lo normal, con el fin de sugerir autoridad. Esto puede contrarrestar el efecto del nerviosismo, que tiende a agudizar el tono de voz.
Adaptado de “How to increase your influence at work”, de Rebecca Knight.