Desde hace mucho tiempo las compañías han valorado las perspectivas de los consumidores que pueden brindar las comunidades en línea, y algunas, como Harley-Davidson, incluso las han convertido en fuente de ingresos al cobrar cuotas de membresía. Sin embargo, no sólo las compañías están aprovechando este modelo de negocio.
Más y más individuos están lanzando sus propias comunidades de membresía, buscando reunir personas alrededor de un interés compartido. Estos no son sólo aficionados. Al cobrar cuotas, típicamente de $20 a $100 mensuales, los emprendedores han creado negocios de seis cifras alrededor de temas tan variados como el cultivo de suculentas, las técnicas para mejorar la memoria, el bloguear sobre comida.
Sin embargo, asegurar el éxito de las comunidades de membresía en línea puede ser un desafío. Tiene que atraer a los suficientes participantes para crear una comunidad dinámica y, lo que es mucho más desafiante, crear una experiencia de alta calidad para los usuarios, que mantenga a sus participantes involucrados —y dispuestos a seguir pagando— a lo largo del tiempo.
Desde el 2016 he dirigido una comunidad en línea para miembros de mi curso Recognized Expert, y he escrito ampliamente acerca de construir flujos de ingresos en línea. Si usted o su compañía están considerando lanzar un sitio de membresía en línea, he aquí seis principios para maximizar el beneficio a sus miembros y asegurar que ellos vean su sitio como algo por lo que vale la pena pagar.
Primero, necesita un lanzamiento con la suficiente base de usuarios. Si las personas van a su sitio y ven que no hay actividad, no se sentirán inclinadas a unirse. Asegúrese de tener al menos 50 participantes antes de salir al ruedo. Una forma de hacerlo es crear una lista de espera, y lanzar su sitio cuando haya llegado al número adecuado. Para identificar a sus primeros participantes, puede recurrir a su lista de correos electrónicos, usar redes sociales para identificar prospectos, o probar el tradicional enfoque de llamar y escribirle personalmente a contactos relevantes para ver si quisieran unirse. Otro modelo para alcanzar una masa crítica es unir la membresía de su comunidad en línea con la compra de un curso o producto.
Segundo, enfoque sus mensajes alrededor del contenido en su sitio. Podría parecer obvio que el valor de una comunidad en línea es la propia comunidad. Sin embargo, a menos que las personas la hayan experimentado de primera mano, es difícil que imaginen cómo serán las interacciones o por qué serán valiosas. En lugar de ello, lo que casi siempre impulsa a los participantes a unirse en primer lugar es la promesa de contenido educativo interesante, así que enfatice eso en su mensaje.
Tercero, involúcrese desde el inicio. Es fácil subestimar la cantidad de tiempo que deberá invertir de antemano para crear una comunidad robusta. Sin embargo, la participación activa del creador del sitio es esencial en los primeros días, por dos razones: 1. Los miembros de la comunidad tienen una conexión con usted pero no entre ellos, así que necesita encender conversaciones para incentivar esas relaciones y hacer que los participantes se habitúen a interactuar. 2. Un moderador involucrado define el tenor de las discusiones y se asegura de que sean útiles y civilizadas.
Muchos profesionales no crean una comunidad en línea porque temen que esta degenere en otro foro para insultos ad hominem y encono. Sin embargo, en tres años de dirigir mi comunidad en línea, ha habido sólo un estallido (alguien pidió consejo, y luego se puso a la defensiva cuando este llegó). Una conversación privada resolvió la situación y nunca hemos tenido otro problema. Desde el inicio definí un tono claro acerca de qué tipo de comportamiento se espera en el grupo y la importancia de respaldar a otros miembros.
Cuarto, no deje que su sitio se convierta en una camarilla. Una de las mejores partes de una comunidad en línea es el sentimiento de conexión que desarrollan los miembros. Sin embargo, la cohesión puede volverse sectaria si no se maneja apropiadamente. Por ejemplo, los miembros con más antigüedad podrían desdeñar a los recién llegados y sus preguntas de “novatos”. Es esencial crear una cultura en la que todos los participantes se sientan bienvenidos.
Quinto, ayude a que las relaciones florezcan fuera de línea. Las comunidades en línea tienen una limitación fundamental. Si realmente quiere incentivar la cohesión del grupo, alentar reuniones en el mundo real es una poderosa forma de hacerlo. Pueden ser conferencias oficialmente reconocidas, o pueden ser informales, como cuando los miembros de mi comunidad publican fotos conectando con otros miembros. Entre más los participantes conecten entre sí, es más probable que se mantengan involucrados a lo largo del tiempo, y adquieran otros productos y servicios. Por ejemplo, los miembros de la comunidad podrían inscribirse a uno de mis talleres en persona, porque consideran que ello acelerará el éxito de sus negocios, pero podrían estar más impulsados a asistir cuando saben que sus amigos también estarán ahí.
Sexto, genere el equilibrio de ventas correcto. Tener una activa comunidad en línea le permite encuestar a sus consumidores todos los días. Puede preguntarles directamente acerca de las dificultades que están enfrentando y los productos o servicios que sienten que serían más útiles. Si está dirigiendo un sitio para amantes de las plantas, por ejemplo, podría descubrir que están desesperados por un entrenamiento personal sobre el cultivo de rosas, o un curso en línea sobre técnicas para enriquecer el suelo.
Sin embargo, como las profesoras de negocios Debi Kleiman y Anat Keinan han señalado, es importante reconocer la diferencia entre una comunidad en línea y un canal de ventas. Las personas no están invirtiendo su tiempo para que se les ofrezcan productos incesantemente, así que tenga cuidado de no vender en exceso.
Sin embargo, no debería perderse las lecciones que puede enseñarle el contacto cercano con sus mejores clientes. La profunda información sobre los consumidores le permite saber que querrán un nuevo producto o servicio que usted podría crear – y cuando genera algo relevante, no es exagerado el hacer que los participantes se enteren. Es parte de la relación de idea y vuelta que ha trabajado duro para construir.
En un mundo donde estamos ahogados con oportunidades de interactuar en línea, no es fácil convencer a las personas de hacer el esfuerzo de participar en otra comunidad. Siguiendo estos seis principios, tendrá muchas más probabilidades de crear un recurso que sea verdaderamente significativo para los participantes y añada un valor real a sus vidas, mientras crea un robusto modelo de negocio para usted.