El manejo de las finanzas nunca es un tema fácil. Menos cuando, más allá de las finanzas personales, la persona también se debe pensar en los flujos de su negocio. Este es el pan de cada día en el caso de los emprendedores y trabajadores independientes.
Por ello, distintas organizaciones y entidades financieras lanzan constantemente una serie de recomendaciones para que esta población pueda guiarse en el proceso de acomodar su flujo de recursos.
En este artículo les compartiremos recomendaciones de Coopealianza y del Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC) que pueden resultar útiles para muchas personas en Costa Rica.
Personas y negocios
El MEIC tiene a disposición el Manual para las personas emprendedoras de Costa Rica, un instrumento que busca guiar a los dueños de negocios en el camino hacia la consolidación y formalización de su proyecto.
Herramientas como esta o el podcast ‘Guía para emprender’ de EF son importantes para quienes están lanzándose al mundo empresarial por cuenta propia, pues abordan temáticas que no suelen ser tan conocidas por la población en general.
El material del MEIC empieza su exposición con conceptos básicos de los flujos de dinero de la empresa. El primer paso es conocerlos e identificarlos bien al empezar a acomodar dichas finanzas.
Tome nota de ellas:
- Identifique cuáles son los activos de su negocio: los bienes y derechos apreciables en dinero y que son propiedad de la empresa. Acá se incluye el dinero en caja o en bancos, las mercancías, los muebles y los vehículos; así como los derechos sobre las cuentas por cobrar y los créditos a favor.
- Tenga claros los pasivos de su empresa: sepa cuáles son las obligaciones contraídas para cancelación en el futuro y tenga claras las fechas de pago.
- Establezca cuál es la liquidez necesaria para poder operar: la liquidez es la capacidad que se tiene para obtener dinero en efectivo de manera inmediata y así poder responder económicamente a las obligaciones a corto plazo. Sepa cuánto necesita su empresa para operar, por ejemplo, mes a mes, y establezca cómo va a acceder a esos recursos.
- Establezca cuánto flujo de caja necesita: el flujo de caja es la variación de la entrada y salida de efectivo en un período determinado y sirve como medidor de la liquidez con que cuenta la empresa.
- Maneje un flujo en caja chica para gastos cotidianos: la caja chica es el fondo de efectivo que se utiliza para gastos diarios y generalmente pequeños. Se recomienda designar a una persona encargada de llevar el control de esa caja.
- Establezca un fondo de equilibrio en sus finanzas: sepa cuál es el punto donde los costos y fijos y variables se encuentran cubiertos. Alcanzar este punto es casi un hito en la empresa, pues una vez llegado a él, todo crecimiento se convierte en ganancia.
- Procure llevar estados financieros claros: estos son los documentos que recopilan la información de la salud económica de la empresa e incluye detalles como pérdidas y ganancias, estados del flujo de efectivo y la memoria de la información contable del negocio.
Además de lo anterior, que va muy relacionado con la economía del negocio, Coopealianza emitió recomendaciones para que los emprendedores manejen sus finanzas personales de forma más eficiente:
- Tenga clara cuál es su información financiera: sepa cuáles son sus ingresos y cuáles sus egresos, qué transacciones se han realizado y por qué, y con cuánto capital cuenta para cubrir gastos en caso de emergencias. Los expertos señalan que “si no tiene un escenario claro y real” sobre este tema, es difícil llegar a sostenibilidad financiera.
- Establezca un sueldo y respételo: defina cuál es la remuneración que recibirá mes a mes y déjela lo más fija posible dentro de la lista de egresos de la empresa. Con ese sueldo se deben cubrir, por lo menos, los gastos básicos personales.
- Separe sus finanzas personales de las empresariales: manténganlas en cuentas claras y separadas para que sean independientes la una de la otra.
- Procure tener más de una fuente de ingresos: este paso es ideal, especialmente mientras alcanza el punto de equilibrio del negocio, pues de esta forma no dependerá por completo del éxito mensual del proyecto para cubrir sus necesidades y podrá seguir con él.
- Cuente con un fondo de emergencia: los expertos señalan que lo ideal es que este fondo contenga lo necesario para cubrir los gastos durante al menos 6 meses o para que se pueda hacer frente a una emergencia como un problema serio de salud.
- Establezca un presupuesto y apéguese a él: así como es recomendable tener un presupuesto familiar, también lo es tener uno para el negocio. Las recomendaciones del primero son similares a estas, así que puede utilizar herramientas como una plantilla o Excel y similares. Sin embargo, es menester ser consciente de que por más que la plantilla esté completa, si no la aplica en la vida real y no la respeta, el documento no le traerá los resultados esperados.