Espacios de oficina, zonas verdes con viveros y edificios residenciales serán parte de la propuesta que desarrolla Portafolio Inmobiliario con Aleste, proyecto de uso mixto que se encuentra en etapa de construcción frente al colegio SEK en Curridabat.
La ‘mini ciudad’ que consta de 67 de hectáreas incluye al Hospital Clínica Bíblica y reconocidos restaurantes como Outback Stakehouse y Olive Garden.
“Es básicamente como un Town Center donde tenemos comercio corporativo, donde se va a ubicar la Clínica Bíblica, un hotel, residencias y vamos a tener una plaza de restaurantes”, comentó Federico Baltodano, director de proyectos de Portafolio Inmobiliario, empresa a cargo de la construcción.
La construcción de Aleste inició en junio de 2021 con la primera fase que consiste en un proyecto residencial en el que actualmente desarrollan el segundo edificio que suma cerca de 200 unidades habitacionales. Esta fase alcanzó una inversión de $10 millones.
En la segunda fase tienen lugar la oferta comercial y de servicios. En este momento en la primera etapa está tomando forma el edificio corporativo que tiene una extensión de 11.000 metros de oficinas y una parte comercial en el primer nivel.
A esta segunda fase se sumarán otros edificios comerciales, los cuales completarán casi 5.000 metros comerciales y restaurantes. Esta inversión ronda los $15 millones.
“Aleste llega a Curridabat en uno de los momentos más complicados de la historia, pero también se convierte en uno de los proyectos más grandes y de mayor envergadura de la historia del cantón. Llega, por ejemplo, en un momento donde el gobierno local y la comunidad como tal tiene una recesión económica importante a nivel de las arcas municipales donde el primer año de pandemia el presupuesto municipal se vino abajo en los ¢5.000 millones”, expresó Jimmy Cruz, alcalde de Curridabat.
En la zona norte de Aleste se ubicarán dos canchas que estarán bajo la operación del Deportivo Saprissa: una de césped natural y otra sintética. Además habrá camerinos y una caseta.
Para garantizar fluidez en el tráfico vehicular, Portafolio Inmobiliario amplía la calle principal de dos a cuatro carriles.
Crate & Barrel, Banana Republic, Old Navy, Women Secret, Cortefiel y Joyería Müller JG son algunas de las tiendas que habitarán en este proyecto.
Ciudad sostenible
Aleste es la primera empresa privada que recibe la Bandera Azul Ecológica en categoría Biodiversidad.
“Se ha trazado la meta de restaurar 29.720 metros cuadrados de suelos degradados, desarrollando un vivero de más de 6.000 árboles nativos que aportan a los servicios ecosistémicos. Asimismo, a través del programa de Ciencia Ciudadana, biólogos expertos y miembros de las comunidades cercanas, levantan datos de aves, anfibios, reptiles y macroinvertebrados para tomar decisiones en pro de los ecosistemas”, detalló Portafolio Inmobiliario.
Aleste trabaja bajo el compromiso de eficiencia de ahorro energético, por lo que instalan sistemas de ventanería de alta eficiencia, paneles solares, ahorro de agua potable, plan de manejo de residuos.
“Tenemos un proyecto de un vivero que hicimos en alianza con el Parque La Libertad. Tenemos casi 5.000 árboles y nuestro compromiso es reforestar esta finca con árboles que generen alto valor ecosistémico para el lugar y podamos devolverle a la tierra un poco de lo que nos ha dado”, aseguró Federico Baltodano, director de proyectos de Portafolio Inmobiliario.
Todos los edificios de Aleste contarán con sistema independiente de paneles solares.
Aleste proyecta generar 1.500 nuevos puestos de trabajo en las distintas áreas de operación y estiman que la apertura oficial será a finales del 2022.
La Finca
Aleste se ubica en la antigua finca cafetalera La Laguna, propiedad de la familia Terán. Fue uno de los primeros cafetales de la meseta central en el año 1840 y en 1849 nace la hacienda La Laguna.
En 1853 se constituye la sociedad que la convirtió en una finca cafetalera beneficiadora y exportadora de café. De este beneficio salió la primera exportación de café a Londres en 1856.
Esta finca ha estado en manos de la familia Terán desde 1930, y ahora la destinaron al desarrollo de construcciones verticales.
“La propiedad se traspasó a un fideicomiso y entonces conforme la propiedad se va desarrollando la familia va recibiendo los beneficios de lo que se va haciendo”, contó Manuel Terán, miembro de la familia Terán.
Sin embargo, el negocio del café no dejará de ser parte de los Terán, pues afirman que el café que dejará de producirse en el sitio, que ahora alberga Aleste, se seguirá produciendo en otra finca familiar en Orosi.