Un total de 4.395 empleos del sector de franquicias del país desaparecieron como efecto directo de la pandemia en Costa Rica. Asimismo, este segmento sufrió una contracción del 18,5% del total de empresas nacionales y un crecimiento de apenas del 3,2% en las franquicias internacionales.
Estos resultados se desprenden del XI Estudio del Mercado de Franquicias en Costa Rica presentado por la Cámara de Comercio de Costa Rica (CCCR), este miércoles 28 de abril.
El estudio cuantifica que, para este 2021 hay 26.074 personas colaborando en el sector de franquicias; en contraste con los 30.469 que se encontraban empleadas en 2019.
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Como explicación al golpe en el empleo, la investigación señala dos vertientes: resultado neto negativo en la cantidad de franquicias y reducción de planilla experimentada por las franquicias que continuaron operando.
Karol Fallas, directora ejecutiva del Centro Nacional de Franquicias (CENAF) de la Cámara de Comercio de Costa Rica; y Allan Gerli, director de CENAF, afirman que esta pérdida se experimentó en segmentos como el retail comercial (tiendas) como efecto de los cierres temporales y suspensión de contratos.
Así como en el sector de alimentos (restaurantes); y en segmento educativo en los centros de cuido de niños, por las mismas razones.
No obstante, los expertos rescatan que existe la posibilidad de recuperación de estos empleos una vez que el aforo permitido regrese a la normalidad, es decir, al 100%.
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Cantidad de franquicias
Por otra parte, la cantidad de franquicias disminuyó en seis, pasando de 361 franquicias en el 2019 a 355 en el 2021.
Las nacionales han experimentado una contracción en los últimos años en términos netos, es decir, considerando las nuevas y las que ya no utilizan este modelo de negocios. En el 2019 se contrajeron en nueve unidades, y para el 2021, la contracción fue de 15 (incluyendo los efectos 2020 y 2021).
“El giro de sector de alimentos prevalece entre las de mayor participación y el sector de servicio especializado se presenta como una opción de crecimiento importante para los inversionistas”, indica el estudio.
A diferencia de las empresas nacionales, las internacionales han mantenido un crecimiento positivo histórico, inclusive durante el periodo de crisis. No obstante, este año se encontró muy por debajo del crecimiento promedio de los últimos ocho, que fue de casi 14 nuevas franquicias por año.
El mayor crecimiento se dio en el 2016 con 28 nuevas franquicias. Para el dato que abarca los años 2020 y 2021, el crecimiento neto fue de nueve unidades, lo que equivale al 3,2% de lo registrado en el 2019.
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Reinvención
La investigación estimó que el 22% de las franquicias tuvieron que adaptarse y cambiar su mercado objetivo.
El 31% tuvo que reducir costos mediante el cambio de proveedores; el 56% tuvo que adaptar o cambiar su producto o servicio ofrecido; y el 86% de las franquicias tuvo que implementar cambios tecnológicos que mejoraran sus procesos.
Dentro de los principales cambios tecnológicos desarrollados por las franquicias, sobresalen:
- Aplicaciones móviles para la comercialización de los productos o servicios (39%).
- La implementación del teletrabajo (44%).
- La utilización de plataformas móviles de terceros para distribuir los productos (53%).
- Uso de las redes sociales como plataforma de publicidad o venta (89%).
Como acciones a futuro, el 6% de las franquicias se plantea comprar otras unidades franquiciadas; el 22% planea incrementar el uso de franquicias multiunidades; y el 14% planea cambiar de actividad económica ―este mismo porcentaje consideraría abandonar el modelo de franquicias―.