Este sábado 3 de diciembre el Ministerio de Salud alertó a la población sobre una serie de lotes de quesos contaminados con la bacteria Listeria monocytogenes, la cual puede ocasionar síntomas como diarrea, fiebre y dolores de cabeza y musculares.
Ante un caso como este, le contamos qué puede hacer su empresa para disminuir los daños, proteger la salud de sus clientes y cuidar la reputación de su marca.
Actuar rápido
Lo primero que debe hacer una empresa (fabricante o comerciante) cuando se detecta un producto contaminado es, como dicta la lógica, retirarlo del mercado cuanto antes.
“Lo más importante es abordarlo rápido, lo segundo es dar la cara de forma transparente”, explica Gustavo Vargas, especialista en mercadeo y profesor del Instituto Tecnológico de Costa Rica (TEC).
Vargas dice que hay que asumir una postura de calma y urgencia: calma, porque hay que comunicarle al público que la empresa está al tanto de la situación y que se está trabajando por una mejora, y urgencia porque se trata de un problema cuya solución no se puede dejar para después, sobretodo si se trata de un fenómeno que puede dañar la salud pública. “Un segundo evento sería trágico”, agrega el docente.
Rodrigo González, abogado de la firma G-Legal y con experiencia en el sector alimentario, recomienda levantar un acta notarial de que efectivamente el producto fue retirado y que se hizo una destrucción adecuada de este, según las normas establecidas por el Ministerio de Salud. De esta forma queda en constancia y con fé pública los lotes, la forma y el momento de destrucción de los bienes contaminados.
Tanto González como Vargas consideran fundamental detectar el origen de la contaminación para evitar futuros contagios. “Hay que revisar los protocolos de inocuidad que hay, ver si necesitan alguna mejora”, dice el abogado. De igual forma, se recomienda un acta notarial que deje en constancia cuál fue el foco de la contaminación para de esta forma determinar el grado de responsabilidad de los involucrados.
Si el origen se da por parte del fabricante, este debe notificar a los comercios con los que negoció para evitar que el producto contaminado llegue al cliente final y así evitar un daño sanitario. “Si el comerciante no acata estas indicaciones, claramente hay un tema de negligencia con el que está actuando y está causando una afectación mayor al consumidor final y también al fabricante, porque, a la hora en que permite la venta, habrá un tema de responsabilidad sobre el daño de la marca, sobre el daño que pueda ocasionar a la salud y son daños muy importantes que necesitan minimizarse a la mayor brevedad posible”, explica González.
Para Vargas, inevitablemente va a haber una afectación a la imagen de la marca, sin embargo mantiene que es vital ser transparente con los consumidores: “jamás esconderse, jamás dar largas, sino actuar”, dice.
Es importante armar un canal de comunicación entre todas las partes involucradas: fabricante, comerciante y consumidor, de tal manera que se pueda dar información clara sobre cuál es el estatus del problema, cómo se va a solucionar y cómo se va a evitar en el futuro.
El caso del queso contaminado
El caso de los quesos contaminados con la bacteria Listeria monocytogenes lo dio a conocer la Dirección de Regulación de Productos de Interés Sanitario del Ministerio de Salud luego de que los análisis microbiológicos del Centro Nacional de Referencia en Inocuidad Microbiológica de Alimentos del Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud dieran positivo para una serie de lotes de distintas marcas.
Según comunicó Salud, estos serían los lotes que se deben evitar:
Lote 0103223091 del queso fresco semiduro rallado, marca TIQUESO, registro sanitario A-4606-11.
Lote: 1031 del queso semiduro rallado, marca QUESOS DEL NORTE LAS CUATRO A, A-CR-21-03200.
Lote 293 del queso semiduro, marca LAS DELICIAS DE MI TIERRA, sin registro sanitario.
Lote 0311:22 del queso no madurado semiduro Mozzarella, marca ITALCONAM, registro sanitario A-CR-1400759.
Lote: 311 del queso tipo Turrialba deslactosado light, marca LITE HOUSE, registro sanitario A-CR-17-09885.
El Ministerio también comunicó que está trabajando en el retiro del mercado de los lotes contaminados en coordinación con los puntos de muestreo, y con el Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa) para el caso de las empresas fabricantes.