Las malas decisiones entre 2015 y 2021 (situación hace un año):
Para comprender bien el terremoto económico que ha padecido el Barcelona, es preciso remontarnos al 2021, pero antes hay que viajar rápidamente al 2015, el último gran año de éxitos deportivos del club.
En 2015, el Barça alcanzó por última vez el triplete (ganó la Champions League, LaLiga de España y la Copa del Rey en una misma temporada; hito triple que el Real Madrid nunca ha conseguido).
El éxito deportivo de aquella temporada catapultó por los aires el favoritismo del entonces presidente Josep Maria Bartomeu en las elecciones de julio de 2015. El Barça es un club polideportivo que no funciona como sociedad anónima deportiva, sino como un club de perfil no lucrativo que es propiedad de sus más de 137.000 socios (característica jurídica que comparte con Real Madrid, Athletic Club y Osasuna). Todos los socios mayores de 18 años pueden votar y ser electos para algún puesto de la Junta Directiva, compuesta por socios.
Josep Bartomeu, quien ocupó el cargo de vicepresidente de la Junta entre 2010 y 2014, había asumido como presidente tras la dimisión de Sandro Rosell a inicios del 2014, y para nadie fue una sorpresa que se impusiera en las urnas con 54,63% de los votos de socios.
Tras dos años de Bartomeu presidiendo la entidad, llegó el primer gran golpe: el fichaje de Neymar, figura blaugrana, por el Paris Saint-Germain (PSG).
Los parisinos realizaron el pago correspondiente a la cláusula de liberación del brasileño, por un monto de 222 millones de euros (hasta hoy el fichaje más caro en la historia del fútbol).
El Barcelona, lejos de hacer una planificación inteligente, rápidamente salió al mercado y desembolsó los millones captados por la venta del brasileño en fichajes para reponer el vacío que dejó “Ney”. Estos fueron los fichajes:
–Ousmane Dembélé (francés) en agosto de 2017, proveniente del Dortmund, por 105 millones de euros + 40 millones en variables.
–Philippe Coutinho (brasileño) en enero de 2018, proveniente del Liverpool, por 120 millones de euros + 40 millones en variables.
–Antoine Griezmann (francés) en julio de 2019, proveniente del Atlético de Madrid, por 120 millones de euros.
Ninguno de estos tres jugadores cumplió con las expectativas con las que llegaron y, lejos de convertirse en una inversión, sus contrataciones a largo plazo se volvieron dinero desperdiciado. A día de hoy, únicamente Dembélé se mantiene en la institución.
A los sobre pagos en fichajes se suma una masa salarial que creció sin control. Solo por poner un ejemplo, en 2017 Lionel Messi renovó por el club con un contrato de 74 millones de euros netos al año entre fijos y variables; una prima de 115 millones de euros por renovar y otra de 78 millones por cumplir el contrato.
Tras una ola de críticas por el manejo financiero y por escasez de éxitos deportivos, a pesar de desembolsar tanto dinero en jugadores que no dieron la talla, Josep Maria Bartomeu renunció a su cargo como presidente en octubre del 2020. Trascendió también una supuesta pelea a lo interno con Lionel Messi y sus manejadores; principalmente con el padre del jugador, Jorge Messi.
Cabe destacar que el Barça, desde 2015, nunca volvió a disputar una final de Champions; sumando frustraciones y goleadas poco probables en ese torneo con todo y jugadores de renombre defendiendo sus colores. Este es el recuento de fracasos en Europa entre 2015 y 2022:
--Temporada 2015-2016: eliminados en cuartos de final en dos partidos contra el Atlético de Madrid, con victoria 2-1 y derrota 2-0.
--Temporada 2016-2017: eliminados en cuartos de final en dos partidos contra la Juventus, con goleada en contra de 3-0, más empate 0-0.
--Temporada 2017-2018: eliminados en cuartos de final en dos partidos contra la Roma, con victoria de 4-1 y derrota de 3-0 (remontada histórica de la Roma).
--Temporada 2018-2019: eliminados en semifinales en dos partidos contra el Liverpool, con victoria de 3-0 y derrota de 4-0 (remontada histórica del Liverpool).
--Temporada 2019-2020: eliminados en 4tos de final en un partido contra el Bayern de Múnich, con goleada histórica en contra de 8-2.
--Temporada 2020-2021: eliminados en 8vos de final en dos partidos contra el PSG, con goleada de 4-1 en contra, más empate 1-1.
--Temporada 2021-2022: eliminados en fase de grupos (grupo E), al quedar terceros tras seis partidos.
El 17 de marzo de 2021, un conocido del club, Joan Laporta, asumió la presidencia del Barcelona con 54,28% de los votos. Laporta ya había ocupado ese cargo, con éxito, entre 2003 y 2010. Después de las elecciones, el nuevo presidente hizo pública la delicada situación económica en la que se encontraba el equipo: una deuda de 1.350 millones de euros y un patrimonio neto negativo de 451 millones de euros.
El escenario con el que se encontraron era tan dramático que incluso mencionaron que estaban en “quiebra contable”. Para hacer frente a esto, el club azulgrana pidió un crédito de 80 millones de euros “para cubrir las obligaciones de tesorería por un plazo de 90 días”, así como una refinanciación de deuda de 595 millones de euros para hacer frente a obligaciones a corto plazo. El club tuvo que dejar ir gratis a Lionel Messi al PSG para prescindir de su salario, absolutamente impagable en 2021. Y comenzó entonces la era actual, con un Laporta dispuesto a reconstruir el club vía todo tipo de estrategias financieras.
Más fondos con la nueva dirección: las famosas “palancas” de Laporta
De cara a la actual campaña (2022-2023), Laporta anunció una serie de mecanismos para generar ingresos de forma ágil, y las denominó “palancas financieras”.
–La primera palanca, que se concretó el pasado 30 de junio, consistió en la venta del 10% de sus derechos de televisión de los próximos 25 años al grupo Sixth Street Partners (una sociedad de inversión) a cambio de 207.5 millones de euros.
–La segunda palanca se cerró el pasado 22 de julio y consistió en la venta adicional del 15% adicional de los derechos de televisión del club de LaLiga, también con Sixth Street Partners y por un monto entre los 320 y 330 millones de euros.
Esto quiere decir que Sixth Street Partners recibirá el 25% de los derechos de televisión del club para los partidos de LaLiga durante los próximos 25 años.
–La tercera palanca que se ha activado hasta el momento consistió en la venta del 24,5% de Barça Studios a la empresa Socios.com, por un importe de 100 millones de euros.
–La cuarta palanca se activó hoy, doce de agosto y se basa en la venta del 24,5% de Barça Studios a la empresa Orpheus Media, administrada por el Jaume Roures por un monto de 100 millones de euros.
Además, el pasado mes de marzo, se concretó un acuerdo de patrocinio con la empresa sueca de streaming de música Spotify, por el que el Barcelona espera recaudar cerca de 450 millones de euros en 12 temporadas.
En total, las cuatro palancas le dan al Barça un colchón inmediato de unos 730 millones de euros para hacerle frente a sus obligaciones actuales. Comentaristas deportivos en Europa y el mundo han alertado que algunas de estas operaciones parecen “hipotecar” el futuro del club a cambio de una promesa acaso cortoplacista de resultados óptimos pronto. Pero estos resultados pueden ser deportivos y/o económicos. El club puede generar excelentes ingresos vía mercadería y venta de imagen, eventos, etc., a la imagen del éxito financiero que ha cosechado todos estos años el Manchester United inglés, con una ausencia casi total de éxitos deportivos desde 2013.
Sin embargo, el plan deportivo con Laporta, liderado por la exleyenda del Barça, Xavi Hernández (entrenador), luce mejor que las mil y una renovaciones fallidas del United. Solo el tiempo dirá si las apuestas de Laporta fueron un éxito o un fracaso, pero esto último no parece tan probable.
Fichajes y renovaciones millonarias en 2022
Parte de la liquidez inmediata que recibió el club se invirtió rápidamente en búsqueda de un pronto éxito deportivo.
El equipo contrató a Franck Kessié y Andreas Christensen, que llegaron a coste cero tras finalizar sus contratos con el AC Milán y Chelsea, respectivamente, y compró a Raphinha proveniente del Leeds (48 millones de euros + 12 millones en variables), a Robert Lewandowski proveniente del Bayern (45 millones de euros + 5 millones en variables) y a Jules Koundé proveniente del Sevilla (50 millones de euros + 12.5 millones en variables).
Además, la institución consiguió renovar el contrato de Ousmane Dembélé y Sergi Roberto, ambos por un salario menor al que tenían en el anterior contrato. De hecho, de ahora en adelante, ningún nuevo contrato que se redacte podrá superar la suma de 10 millones de euros netos por temporada.
En estos momentos, el Barça negocia con tres jugadores una renegociación de sus contratos a la baja: con Gerard Piqué (quien habría aceptado), Marc-André ter Stegen y Frenkie De Jong, con quien hay incluso posibilidades de ir a juicio por supuestas irregularidades con su contrato de 2019, cuando Bartomeu era el presidente.
¿Qué pasa con LaLiga? ¿Por qué hay problemas para inscribir jugadores?
El mayor problema que enfrenta el Barcelona actualmente es el mismo que le impidió renovar a Lionel Messi en 2021 y el que le generó varios dolores de cabeza en el pasado mercado invernal: la inscripción de nuevos jugadores.
Lo primero que se debe entender es que LaLiga tiene tiene un mecanismo económico denominado límite de coste de plantilla deportiva, conocido popularmente como límite salarial (salary cap). Este concepto se refiere al importe máximo que cada club debería consumir durante la temporada.
Este instrumento se empezó a utilizar en el 2013, con el objetivo de que la competición sea sostenible y que se garantice la salud financiera de sus 20 equipos participantes.
En este límite salarial están incluidos los gastos correspondientes a jugadores, entrenador, asistentes, preparador físico, así como los equipos filiales (Barça Atlètic), cantera y otras secciones.
Según su portal web, en España cada club le hace una propuesta a LaLiga con su límite de coste de plantilla deportiva y posteriormente le compete al Órgano de Validación de LaLiga aprobar el límite propuesto o rectificar para que se garantice la estabilidad financiera del club.
En el caso del Barça, sus últimos dos límites salariales publicados fueron de 97,9 millones de euros para el mercado de verano del 2021, y -144,35 millones de euros para el mercado invernal del 2022.
Esta reducción tan drástica se produjo debido a que la institución tuvo 242 millones de euros de pérdidas más de las que realmente se habían previsto en mayo del 2021.
Es importante destacar que según mencionó Eduard Romeu, vicepresidente económico del Barça a inicios del pasado mes de junio, la masa salarial del club es de 560 millones de euros.
Ahora bien ¿qué pasa cuando la masa salarial de un equipo es mayor a su límite salarial fijado? Pues puede traer problemas para inscribir a nuevos jugadores. Es por esto que pese a haber llegado a un acuerdo para la renovación de Lionel Messi hace un año, el argentino tuvo que abandonar el club.
Según dice el artículo 100 de las normas de elaboración de presupuestos de clubes y sociedades anónimas deportivas (SADs), un equipo cuya masa salarial supera el límite impuesto puede inscribir nuevos jugadores siempre y cuando destine a estos un 25% del total del monto ahorrado en cuestiones relacionadas con el coste de la plantilla, como lo pueden ser la venta de jugadores. En palabras sencillas, por cada cuatro euros ahorrados se puede gastar uno.
Otra pregunta que surge es: ¿se puede modificar el límite salarial a lo largo de la temporada? La respuesta es sí, pero para esto el club debe generar ingresos por medio de firmas con nuevos patrocinadores, ventas de jugadores o inyecciones de capital.
¿Cuál es una posible solución?
Según explica el diario Mundo Deportivo, LaLiga lleva revisando toda la documentación presentada por el Barcelona desde el pasado 2 de agosto, en la que se tomaron en cuenta las tres palancas ya ejecutadas.
El club habría recibido desde el pasado 4 de agosto un comunicado por parte de LaLiga en la que se les informa que todavía hace falta ingresar más dinero para poder registrar los cinco fichajes nuevos y las dos renovaciones.
Por ahora, después de activar la cuarta palanca, la entidad blaugrana debe centrarse en concretar más salidas de su plantel, ya que según menciona el medio deportivo español Relevo, y su periodista Sergio Fernández, ningún equipo de LaLiga puede aumentar el límite salarial que tenía antes de la pandemia por el concepto de ingresos extraordinarios (671 millones de euros en el caso del Barcelona).
¿Por qué el Barça, pese a ingresar 720M, no puede inscribir aún a sus fichajes?
— Relevo (@relevo) August 6, 2022
Vendido un 25% de derechos de TV a Sixth Street y si vende el 49% de Barça Studios, ¿qué le falta?
Lo de siempre: hueco en el tope salarial. Da igual que ingresen más. 🧵👇
✍️ @sergiofernan5ez pic.twitter.com/76dM4yE8Zp
Esto por un acuerdo que tienen los equipos con LaLiga para devolver sus deudas causadas por la pandemia, por lo que de momento el club deberá cerrar más salidas para generar espacio para la inscripción de los nuevos contratos.
El portal web de LaLiga muestra que Franck Kessié, Andreas Christensen, Robert Lewandowski y Raphinha ya se encuentran inscritos. Todavía está pendiente Jules Koundé.
Ousmane Dembélé y Sergi Roberto también se encuentran habilitados para jugar.
Hasta el momento, se han desligado de la entidad Riqui Puig, Neto, Óscar Mingueza, Dani Alves, Moussa Wagué, Francisco Trincão, Rey Manaj, Clément Lenglet, Adama Traoré, Philippe Coutinho, Luuk de Jong, Ferran Jutglà y Nico González.