El mercado de libros en Costa Rica se mueve con nuevas dinámicas que va generando la industria y las tendencias de consumo, así como actores editoriales muy proactivos.
La Librería Internacional actualmente cuenta con 26 puntos de venta físicos o librerías, de las cuales solamente una se ubica fuera de la Gran Área Metropolitana y muy cerca de playa Herradura.
“Es nuestra primera incursión en la zona rural”, dijo Érica Marín, subgerenta general de Librería Internacional. “Para este 2024 planeamos la apertura de más librerías físicas”.
La cadena, que también cuenta con una tienda en línea y actualmente supera los 100 colaboradores, incluyendo los de sus oficinas centrales de Plaza Mayor, Rohrmoser, fue fundada en 1995 en un local en Barrio Dent por Hans Venier.
En 1998 abrió dos nuevos puntos de venta en centros comerciales, primero en Multiplaza Escazú y luego en Mall Internacional en Alajuela.
A partir de este paso impulsó un crecimiento continuo. Parte de la estrategia es colocarse en los principales centros comerciales del país y otros puntos claves como la Avenida Central.
Desde el punto de vista de la estrategia de comercialización y distribución, el objetivo es ubicarse lo más cerca posible de “una clientela cada vez mayor”.
El crecimiento de esta marca es consonante con los números de importación de libros en el país.
Mercado local
Actualmente, el mercado local parece recuperarse después de las crisis del 2018 (por la reforma fiscal) y del 2020 y 2021 (los primeros años de la pandemia).
La importación de libros sumó en el 2023 más de $7,4 millones a nivel nacional, superando los ocho años anteriores con excepción del 2016 ($9,7 millones).
La industria es cada vez más proactiva para impulsar el consumo y la lectura.
A la par de la Editorial de Costa Rica y de las editoriales de las universidades públicas, que la semana anterior realizaron una feria en la Universidad Nacional, en Heredia, hay una buena cantidad de empresas en el sector relacionadas directa o indirectamente.
La Cámara Costarricense del Libro abarca también otras editoriales de instituciones y privadas, así como distribuidoras e importadoras de libros.
La entidad organiza la Feria Internacional del Libro cada año. La última versión tuvo 100 stands de librerías y casas editoriales. La asistencia superó las 30.000 personas, más allá de las expectativas.
El gremio señala que las condiciones de Costa Rica favorecen el crecimiento de la lectura y de la circulación del libro, tanto nacional como importado: el nivel académico de la mayoría de la población y la infraestructura industrial (con empresas especializadas en la producción técnica de libros y materiales de lectura).
El acceso a las nuevas tecnologías de edición e impresión, la red vial y de comunicaciones terrestres, marítimas y aéreas, así como de las telecomunicaciones, favorecen al sector en la difusión y la distribución de libros.
Hay marcas reconocidas, como Librería Lehmann y Tiendas Universal. Esta última, por ejemplo, tiene 12 locales, incluyendo uno en Liberia, y sigue el modelo de tienda por departamentos con ventas de juguetes, artículos de verano, electrodomésticos, hogar, tecnología y belleza, además de libros.
Están también librerías especializadas como Duluoz, en Barrio Dent, y Librería Andante, en San Pedro de Montes de Oca.
En Costa Rica se registran 205 librerías, de las cuales solamente 165 tienen menos de 5 colaboradores y solo tres superan las 100 personas en sus planillas, de acuerdo con datos de la Caja Costarricense del Seguro Social a junio de 2023.
Buena parte de ellas son librerías locales que comercializan textos y materiales escolares. Como el caso de la librería El Nido en Heredia, que recientemente anunció su cierre debido a que los propietarios del edificio, donde se ubicó durante cinco décadas, le solicitaron el local. Hay más empresas relacionadas con la industria.
Se contabilizan también 49 empresas de edición de libros, folletos, partituras, periódicos, revistas y otras publicaciones. Hay 17 empresas en otras actividades de edición y 285 en actividades de impresión, que producen otros tipos de artículos.
Tendencias
Parte de la estrategia de las principales librerías es seguir atentas a las tendencias del mercado de consumo, tanto de libros como de artículos relacionados con la lectura y el entretenimiento.
En el caso de Librería Internacional se ofrece una amplia diversidad de géneros de ficción y no ficción, infantiles y juveniles, e ilustrados. Se suma la oferta de regalos para el hogar, oficina y diferentes actividades, juguetes y juegos infantiles, creatividad (arteterapia y cuadernos de notas), juegos para adultos (juegos de mesa y rompecabezas) y agendas y calendarios.
Los ajustes a otras tendencias y acontecimientos marcan la pauta. Marín resaltó que uno de los hitos más significativos para su empresa fue la pandemia de la covid-19 en los años 2020 y 2021.
“Esta crisis presentó un desafío sin precedentes para nuestro negocio”, recalcó la subgerenta.
La ejecutiva explicó que inicialmente se enfrentaron las restricciones en la venta presencial como parte de las primeras medidas de confinamiento y distanciamiento social. La situación implicó una rápida adopción.
En primer lugar, con el impulso a las operaciones de comercio electrónico por medio de la librería en línea.
La cadena ya tenía un sitio web. La pandemia abrió “una oportunidad” para mantenerse conectados con los clientes y atender sus necesidades de lectura y entretenimiento durante el confinamiento. Desde ese momento se fortaleció la presencia en línea.
“Hemos aprendido la importancia de la flexibilidad y la innovación en un entorno en constante cambio”, afirmó Marín. “Este enfoque no solo nos permitió mantenernos relevantes en un momento desafiante, sino que también fortaleció nuestros lazos con la comunidad de lectores y demostró nuestro compromiso continuo con acercar a las personas a la lectura y la cultura”.
Actualmente, por ejemplo, se mantiene un boletín de anuncios sobre lanzamientos de títulos que llega a los correos electrónicos de los clientes suscritos al club de lectura. Además, como en el caso de la reciente publicación de la novela póstuma de Gabriel García Márquez, se realiza una preventa en línea.
Perspectivas y aperturas
Librería Internacional confía en la solidez del mercado local de lectura para su estrategia comercial.
La Encuesta de Actualidades del 2022, de la Escuela de Estatística de la Unversidad de Costa Rica, muestra que el 89% de los encuestados considera que la lectura no es una pérdida de tiempo, 53% asegura que es uno de sus pasatiempos preferidos, 57% dice que lee únicamente si lo tiene que hacer y 51,5% lo hace para buscar información.
La Encuesta Nacional de Cultura de 2017, del Instituto Nacional de Estadística y Censos, mostró que 43% dice leer y 13% lo hace todos los días, en mayor medida en zonas urbanas y entre mujeres.
“Estos datos nos indican que sí hay una tendencia a la lectura como una práctica de entretenimiento y placer”, recalca Marín. “Sabemos que las cifras se pueden mejorar y es parte de nuestra labor como negocio”.
La ejecutiva confía también en la resiliencia de la empresa y la industria, “en continúa evolución”, con la adaptación a las nuevas tecnologías y la diversificación del negocio, la creación de espacios culturales, la promoción de productos o la creación de eventos literarios.
“Son estrategias que revisamos constantemente para mantener la relevancia y el crecimiento en este mercado”, dijo Marín. Tal estrategia y objetivos se concretan en los planes inmediatos.
“Librería Internacional tiene el propósito de acercar a las personas a la lectura y la cultura. Bajo esta motivación que tenemos, el plan está basado en abrir dos nuevas sucursales durante el 2024 que permitan abarcar más territorio nacional y llegar a zonas donde impactemos de manera positiva”, especificó Marín.