El negocio local de transporte de mercancías —que abarca las compañías de servicio exprés y aquellas encargadas de recorrer largas distancias haciendo entregas propias— fue una actividad que se vio dinamizada por la pandemia.
Para quienes están dentro de este segmento el ritmo se ha mantenido en incremento constante hasta la fecha.
Entre las principales razones del repunte de este sector productivo destacan la aceptación de los nuevos canales digitales para realizar compras en línea y los nuevos hábitos de consumo.
Según datos brindados a EF por la Gerencia Comercial de Correos de Costa Rica, desde marzo de 2020 —y particularmente a partir de mayo del mismo año—, el volumen de envíos nacionales presentó un importante crecimiento, producto de la necesidad de las personas y empresas de buscar medios alternativos para la comercialización y entrega de sus productos.
“Los servicios courier o de envío han sido la partida de ingresos que ha registrado el mayor crecimiento en los últimos años. Durante diciembre de 2020 se registró un récord histórico, en el cual solo para el Servicio de Correo Exprés Nacional se procesaron 546.100 paquetes, un 64% más que el total procesado en diciembre del 2019”, afirmó la Gerencia.
Para este 2021, entre enero y mayo, se registró un promedio en el volumen de envíos nacionales de 102.000 paquetes al mes, en comparación con los 82.200 paquetes mensuales enviados en el mismo periodo del 2020.
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Sin embargo, algunos aspectos como las cambiantes restricciones sanitarias; los costos del combustible; la transformación digital; y hasta la inseguridad ciudadana en algunas partes del país, han supuesto un reto importante para estos negocios.
Por ejemplo, María Pía Robles, directora de Relaciones Corporativas de Fifco explicó a EF que producto de la pandemia y las implicaciones económicas y comerciales que ha tenido el país, se ha reducido la disponibilidad de unidades de transporte de mercancías en 25%, lo cual ha impactado no solo la capacidad instalada de Fifco, sino también los costos de transporte.
“En Fifco registramos una reducción en las entregas al canal abierto (restaurantes, bares, comercios de consumo en sitio) debido a las restricciones por pandemia y un aumento en los canales de supermercados, tiendas de conveniencia y pulperías. Específicamente, se ha dado aumento en las entregas a domicilio que ha sido experimentado de forma directa por nuestros clientes”, expresó Robles.
Por su parte, Geovanni Campos, gerente de logística de Correos de Costa Rica explicó que el precio del petróleo ha tenido incidencia directa e inmediata sobre el presupuesto de la empresa, sin embargo, aclaró que las operaciones no se ven afectadas de cara a sus clientes.
Detalló que el principal reto para Correos ha sido la adaptación a las nuevas necesidades de entrega.
“El principal reto ha sido el cambio en el formato de los paquetes que estamos distribuyendo, que cada vez son más voluminosos, y por ende se dificulta que puedan ser trasladados en los maleteros de las motocicletas. Esto nos ha llevado a usar más vehículos tipo buseta para entrega y a redefinir las características y funcionalidades de nuestra flotilla vehicular, para adecuarla a la nueva realidad”, dijo Campos.
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Las industrias que son usuarias finales de los servicios de transporte, también han sentido los efectos generados en los últimos meses. Silvia Chaves, presidenta la empresa fabricante de productos de limpieza Florex, expresó que han tenido que enfrentarse a la lentitud en la llegada de materias primas, así como a su encarecimiento.
“Hemos sufrido un considerable aumento en materias primas, entre los principales factores por un aumento en el costo de su transporte. Entre las materias primas se incluye la resina 100% reciclada que usamos en nuestros envases actualmente”, dijo Chaves.
Florex realiza la labor de recolección de envases que tienen sus clientes —acumulados y guardados— alrededor del territorio nacional. Los llevan de nuevo a su planta y los acondicionan para reuso o para molerlos y que se conviertan en la resina de sus próximos envases. “Es logística inversa. Hay que maximizar las rutas, sacándoles el mayor provecho posible”, agregó la presidenta de Florex.
En cuanto a tecnología, Allan González, gerente de Logística de Grupo Monge, enfatizó que la transformación digital y los medios de comunicación hacen que sus clientes sean cada vez más exigentes con los modelos de entrega, por lo que solicitan entregas en menor tiempo y con servicios extendidos.
González destacó que el 2020 generó un incremento de transacciones en línea reflejado en un incremento en despachos —que se ha mantenido hasta la fecha— y que tienen certeza de que se continuará desarrollando, aunque no detalló las cifras.
“Ahora contamos con clientes que anteriormente no participaban de la experiencia en línea y cada vez se van familiarizando más. La tecnología nos permite planificar de manera eficiente, efectiva, con seguimiento y monitoreo en el mercado, la optimización de la flota vehicular, mejora de los tiempos de entrega, reducción del consumo de combustible y en general el uso de los recursos”, precisó González.
La adaptación
En general, una de las principales estrategias que aplicaron las compañías dedicadas al transporte de mercancías fue el de reforzar su capacidad operativa instalada pero con el apoyo de recursos tercerizados, los cuales dependen de la demanda o fluctuaciones de volumen en ciertos períodos.
Esto les ha permitido optimizar costos logísticos y mejorar sus niveles de servicio con los clientes.
Asimismo, han tenido que acogerse al uso de herramientas digitales para configurar sus rutas de reparto, ya que debido al aumento de pedidos que ingresan por las plataformas en línea, la frecuencia del servicio de entrega se duplicó.
Maricel Álvarez, gerente de Asuntos Corporativos para Costa Rica y Nicaragua de Coca Cola-Femsa, afirmó que la coyuntura actual motivó a la compañía a avanzar en “prioridades digitales”, lo cual aceleró la creación de nuevos servicios tecnológicos para el cliente.
“Se aceleró el despliegue de plataformas como el sitio web Juntos, donde el cliente puede realizar sus pedidos en cualquier momento, al igual que el asistente virtual de WhatsApp. También, se creó la aplicación Coca-Cola en tu Hogar, con el servicio de entrega de productos a domicilio”, explicó Álvarez.
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En cuanto al segmento de vehículos, Esteban Fernández, director regional de Isuzu, expresó que las empresas de distribución están a la búsqueda de camiones pequeños de 2,5 toneladas y las denominadas paneles o camionetas (pequeñas y medianas) para realizar las respectivas entregas.
Fernández destacó que, la industria automotriz ha sufrido por el tema de la pandemia, pero el segmento de vehículos comerciales fue el menos impactado, ya que “los bienes esenciales no se dejan de consumir. Se puede definir como el segmento all season (cualquier temporada)”, dijo el vocero de Isuzu.
Por su parte Fifco, impulsó iniciativas de digitalización de cara a los clientes, como la plataforma de relación con los clientes “Fill” y el lanzamiento de “La Pulpe Digital”, un canal de comercio en línea para que pequeños comerciantes detallistas pudieran vender sus productos.
Asimismo, Grupo Monge —el cual cuenta con una cadena de distribución con más de 180 puntos de venta—, absorbió el cambio en los hábitos de consumo debido a que desde el 2015 contaban con una plataforma de e-commerce.
No obstante, aplicaron una reingeniería de procesos para asegurar la integridad, seguridad y comodidad de los clientes y colaboradores en tiendas; buscaron alternativas como “Monge a tu Puerta”, donde le llevan el artículo al cliente hasta a la puerta de la casa o vehículo; la modalidad de entrega gratis en todos los pedidos de tienda en línea; y la opción de retiro en tienda.