La marca nacional de productos de limpieza Florex lanzó su plan piloto para ventas a granel. Con esta iniciativa, Florex se suma a una tendencia que en los últimos años ha aumentado su oferta en Costa Rica.
El plan de Florex comenzó con tres productos y haciendo pruebas en condominios amigables con el ambiente, antes de llegar a su punto de venta de San Ramón y proyecta su expansión a las otras tiendas de la marca, en Liberia y Pérez Zeledón.
La empresa ha invertido $5.000 en adaptaciones y en el análisis del modelo idóneo de comercio a granel, prácticas para reenvasar y para atender múltiples variables, como la rapidez de entrega, el aseguramiento de la calidad del producto y la inocuidad.
De hecho, el tema de la adecuada manipulación es uno de los puntos de dolor del sistema a granel.
Pedro Alfaro, gerente comercial de Florex, explicó que los resultados de estos procesos los llevaron a definir que solamente aceptarán los envases de cada producto específico, es decir, que si desea comprar detergente debe llevar una botella de detergente.
Esta medida se tomó para cumplir con los requisitos de etiquetado e identificación que pide la ley, sin incurrir en gastos adicionales. Ese ahorro para Florex se convierte en una reducción en el precio al consumidor de entre 10% y 15% del costo regular.
La tienda recibe envases Florex de galón y medio galón y puede dispensar las cantidades de producto que comercializa la marca normalmente: 240 mililitros, litro, medio galón y galón.
“A cada cantidad de producto entregada se le asigna un lote de producción y una fecha de caducidad correspondiente. Este procedimiento permite que los galones que lleven los consumidores puedan ser reutilizados constantemente por años”, aseguró Alfaro.
Motivación ambiental
El impulso que ha tomado la venta a granel es consecuencia de los conceptos amigables con el ambiente que acompañan a ciertos negocios. Florex, por ejemplo, nació como una empresa ambientalmente responsable, y otros casos de venta a granel también surgieron para responder a inquietudes de sus propietarios sobre reducción del impacto de las actividades comerciales sobre el planeta.
EF consultó otros cuatro negocios con ventas a granel. Todos coinciden en que este recurso tiene un impacto positivo en la generación de una cultura para la reutilización de envases. También señalan como una ventana que su masificación podría eliminar la utilización de materiales desechables para embalaje o empaque.
El Granero, en Escazú, responde al concepto cero desperdicio, mientras El Tramito a Granel, en Curridabat, defiende la práctica de comercio tradicional y libre de plástico.
Estefanía Badilla, de El Granero, relató que el objetivo del negocio es recrear el estilo de vida sencillo de las compras tradicionales a granel.
Roxana Garita, una de las propietarias de El Tramito a Granel, explicó que su emprendimiento se deriva de un tramo del Mercado Central de San José, operado desde hace más de 75 años por su familia, y busca replicar la experiencia de comercio tradicional de los mercados, pero con mayor consciencia sobre los empaques.
Ahora están incursionando en la venta de pan elaborado con las recetas de uno de sus abuelos, quien fuera propietario de Panadería La Española, un comercio referente de San José y que se mantuvo vigente hasta el 2014.
“Queríamos llegar a ese público que cada vez es más consciente de la importancia de consumir productos más naturales y además eliminar los envases o empaques de un solo uso. Cada uno de los tramos tienen su propia identidad y su propio sello, pero en ambos se busca que nuestros clientes vuelvan a la esencia y compren con sentido”, afirmó Garita.
Otro caso es el de Esencia Mercadito, en Heredia, cuyo concepto es más bien gastronómico, mezcla de restaurante y mercado, y agregó la venta de productos a granel por considerarla consecuente a su idea de disminuir la huella ecológica de su propuesta.
Priscila García, copropietaria de Esencia, dijo que la oferta a granel ha tenido buena acogida desde la apertura del local, en enero de 2019.
El supermercado Green Center, en Escazú, está implementando un nuevo sistema para sus ventas en esta modalidad e invirtió en 20 dispensadores, para comercializar materias primas orgánicas. Ana María Guardia, gerente de Green Center, explicó que están en el proceso de instalación de estos equipos.
“La gente trae su envase o compra los que tenemos disponibles para rellenar y se les cobra por la cantidad de compran, el precio es por kilo o por litro”, comentó Guardia.
La oferta
Florex: detergente para ropa, champú para cuerpo y jabón de manos.
El granero: Pasta seca, granos, cereales, semillas, nueces, frutos secos, té, productos de limpieza, productos de cuidado personal, especias, chocolate, café, harinas y superfoods.
El Tramito a Granel: Quesos, especias, condimentos, granos, semillas, jabones de uso personal y para perros, entre otros productos.
Esencia Mercadito: Avena normal, integral y tipo mosh, quinoa roja y blanca, lentejas, garbanzos, linaza, frijol orgánico de Upala, arroz integral, coco deshidratado, granola casera, rosa Jamaica, maca, espirulina, pasas, nueces, pecanas, semillas mixtas, maní garapiñado, semilla calabaza, macadamia y almendras enteras.
Green Center: Las frutas y verduras, granos orgánicos como los garbanzos, lentejas, maíz de popcorn, arvejas, el café, cacao nibs, chia, kombucha.
Fuente: Entrevistas hechas por EF