Las elecciones mexicanas dan el gane a Morena (Movimiento Regeneración Nacional). Claudia Sheinbaum, científica, será la primera presidenta de México y su partido controlará diputados y senadores, aplastando a la vieja política. Su triunfo fue arrollador (59%).
Sus votantes fueron mayoritariamente hombres, sin diferencias significativas en cuanto a educación o edad. Únicamente en personas con ingresos más altos hubo acercamiento entre las dos candidatas. Claudia perdió con patronos y empleadores.
LEA MÁS: La victoria de Claudia Sheinbaum en México resumida en tres claves
En lo que respecta a los órganos legislativos los oficialistas tendrán entre 346 y 380 diputaciones (mayoría calificada) y 76 y 88 senadurías (mayoría absoluta), lo que permitirá avances en algunas reformas constitucionales.
Vistos los resultados de nueve gubernaturas, el partido de gobierno gobernará 24 estados, El PAN pierde una gubernatura, mientras que el PRI y el Movimiento Ciudadano continúan gobernando dos estados cada uno.
Esta apabullante victoria se origina en el carisma de López Obrador, en una narrativa anclada en la promesa de una transformación social para los más pobres, en una situación económica buena y en medidas concretas de política social como aumentos del salario mínimo y transferencias a los más desfavorecidos.
Sheinbaum enfrenta desafíos: inseguridad derivada de la guerra narco, femicidios, la militarización de la seguridad ciudadana, la abrumadora presencia de los militares en la realización de obra pública, la deuda de petróleos mexicanos, conflictiva relación con el poder judicial, nuevas políticas de género, y la difícil relación con los Estados Unidos en materia migratoria, particularmente en el caso de una victoria de Donald Trump.
Desde la perspectiva de la política interna, la relación con el expresidente será difícil si este quiere seguir gobernando virtualmente.
Empero la nueva mandataria tiene claro su camino: “Sabemos que el disenso forma parte de la democracia y, aunque la mayoría del pueblo respaldó nuestro proyecto, nuestro deber es y será siempre velar por cada uno de los mexicanos sin distingos. Aunque muchos mexicanos no coincidan plenamente con nuestro proyecto, habremos de caminar en paz y armonía para seguir construyendo un México más justo y más próspero”.
---
Constantino Urcuyo Fournier es abogado y doctor en Sociología Política de la Universidad de París. Catedrático de la Universidad de Costa Rica, exdiputado y director académico del Ciapa. Profesor visitante en las universidades de Tulane y Salamanca. También es consultor internacional y nacional para diversas empresas.