En los últimos años e incluso meses, hemos podido identificar el importante avance que la Inteligencia Artificial (IA) ha tenido en el mercado empresarial, causando preocupación entre los profesionales que temen perder sus puestos de trabajo a manos de las máquinas.
También es posible identificar fácilmente que la IA generativa no se parece a ninguna tecnología que hayamos tenido antes. Esta está cambiando rápidamente la forma en la que hacemos negocios y cómo se maneja la sociedad, obligando a los líderes a replanificar sus hipótesis, planes y estrategias en tiempo real.
Aunque hoy hay muchas dudas sobre el tema, también existe una visión clara de que la IA generativa está redefiniendo todos los trabajos y revolucionando las áreas de desempeño, desde las personas con los roles de nivel inicial hasta los puestos directivas y vemos que esto no reemplazará a las personas. Sin embargo, lo que sí ocurrirá es que serán las personas que sepan usar la IA quienes lleguen a tomar los puestos de aquellas que no lo hagan.
El estudio IBM Global AI Adoption Index 2023, reveló que siguiendo la tendencia global actual en las empresas de América Latina, la mayor barrera existente para la adopción de IA es la limitación de habilidades que tienen las personas, falta de experiencia o conocimiento relacionado a la IA (32%). Pero la buena noticia es que este mismo estudio apunta que para abordar este problema, el 38% de las empresas de Latinoamérica tienen dentro de sus proyecciones anuales invertir en capacitar y desarrollar su fuerza laboral durante los próximos 12 meses con el objetivo de alcanzar la demanda del mercado.
Es clave reconocer que las empresas deben centrarse tanto en atraer como en retener el talento con el que ya cuentan, pero al mismo tiempo, requieren preparar a su fuerza laboral para enfrentar nuevos retos como lo es trabajar con nuevas aplicaciones de Inteligencia Artificial. Esto significa combinar la experiencia humana y el conocimiento de procesos complejos con herramientas de IA para lograr el cumplimiento de objetivos con mayor agilidad. También implica enseñar a las personas las habilidades necesarias para trabajar de manera creativa y responsable con estas tecnologías.
Sin duda, es importante resaltar que esto no quiere decir que todos los colaboradores dentro de una organización tendrán que aprender a desarrollar o programar; sin embargo, la mayoría si tendrá que familiarizarse con las nuevas soluciones de IA que están surgiendo. Al mismo tiempo, las empresas tendrán que pensar sistémicamente y de forma estratégica en asignar roles que sean más gratificantes e impactantes para el negocio. De esta manera, implementar la Inteligencia Artificial en los flujos de trabajo de una empresa no solo impulsará nuevos conocimientos e innovación, sino que también conducirá a una fuerza laboral más satisfecha y productiva.
Como toda innovación a través de la historia, es fundamental tener conciencia de que los colaboradores requieren pasar por un proceso de adaptación en la que se deben aprender nuevas habilidades para abandonar aquellas que pueden ser realizadas por los nuevos recursos tecnológicos con los que se cuenta. Para eso, es importante que los profesionales puedan buscar formación técnica en relación con la IA para tener las herramientas y capacidades para adaptarse a esta nueva realidad.
Como es indispensable generar espacios para la capacitación de los profesionales y de las personas que deseen estar vigentes en el mercado actual, la propia IBM cuenta con un programa de educación llamado IBM SkillsBuild, que ofrece cursos cortos, gratuitos y en español sobre habilidades que puedan ser implementadas en el lugar de trabajo, así como tecnologías como la IA e IA Generativa. Además, las capacitaciones ofrecen certificaciones y están diseñadas bajo la metodología de aprendizaje por proyectos para aplicar el conocimiento aprendido de forma práctica.
Por mucho que estas tecnologías emergentes impulsen la productividad y rendimiento de las personas y las empresas, es indispensable comprender que ninguna tecnología sustituye la visión humana, así como el criterio que existe detrás de la toma de decisiones estratégicas, elemento que aporta un importante factor diferenciador entre una empresa y otra.
Un ejemplo de ello es el reciente caso de éxito del Sevilla FC, que desarrolló una herramienta impulsada por IA generativa que les ayuda a encontrar al jugador ideal para una determinada posición, entre una base de datos con 200.000 informes. Por mucho que la IA haga que este proceso sea más dinámico y asertivo, es el ojo humano el que es capaz de evaluar a un deportista como un todo, con sus características físicas y de comportamiento, para que estos datos puedan tener sentido.
La IA y otros avances tecnológicos que se logren de la mano de estas herramientas permitirán mejorar y expandir la capacidad y potencial humano, a su vez, facilitará a la organizaciones ciertos procesos y automatizar otros, abriendo la posibilidad para que los equipos de trabajo enfoquen sus esfuerzos en el pensamiento estratégico y la capacitación para el manejo de estas tecnologías.
--
La autora es Country Leader de IBM Costa Rica.