Para nadie es un secreto que la inteligencia artificial (IA) ha venido a tomar el puesto de muchas personas que hacían labores operativas. Trabajos como atender la caja de un supermercado, traducir un documento y responder mensajes simples en un call center, son cada vez más, ocupados por modelos de inteligencia artificial.
¡Lo que es mucho más difícil de imaginar, es que la IA pueda reemplazar a un alto ejecutivo en una empresa! Este es precisamente el caso del nuevo CEO de NetDragon Websoft, una empresa china líder en videojuegos, educación en línea y aplicaciones móviles. En un anuncio realizado por el presidente de la junta directiva se compartió el nombramiento como CEO de la “sra. Tang Yu” (un robot humanoide impulsado por inteligencia artificial). El chairman señaló que esperan aumentar la eficiencia de la empresa, mejorar el manejo del riesgo, aumentar la objetividad en la toma de decisiones y hacer de la empresa, un lugar de trabajo más justo para todos los colaboradores.
Lo interesante es que, en los primeros meses, la respuesta del mercado fue muy positiva. La acción de la empresa se valoró en un 10% y los inversionistas perciben beneficios en generar dentro de la compañía, un ambiente abierto, interactivo y altamente transparente.
Por supuesto, los riesgos de estas tecnologías emergentes también son muy evidentes. Hemos visto como mecanismos de inteligencia artificial pueden llegar a responder cosas que no tienen ningún sentido y que son políticamente incorrectas. Como bien dice Roy Amara: “tendemos a sobreestimar el efecto de una tecnología a corto plazo y subestimarlo a largo plazo”.
Más allá de seguir observando las decisiones que toma la CEO Tang Yu, debemos aprovechar las capacidades increíbles que tiene la IA generativa de crear código, textos, sonidos, imágenes y hasta de realizar labores en las empresas como mercadeo digital o ventas. Sin embargo, debemos hacerlo con la claridad de que aún en la labor más mecánica del mundo, nada puede reemplazar el buen juicio y el sentido ético de un ser humano.