Tener un red social y publicar a lo loco promociones, información de productos o contenido no garantiza el éxito de la presencia digital de su negocio. Peor es cuando las empresas tienen perfiles en redes sociales y al revisarlas tienen días, semanas e incluso meses sin actividad.
Los canales digitales, como las redes sociales y los sitios web, son medios estratégicos para llegar a un público más amplio, a clientes potenciales y a clientes actuales. Pero hay que estar activos y utilizar recursos atractivos. El problema es que la competencia de su empresa ya lo sabe.
“Es fundamental que las empresas entiendan al consumidor digital y apliquen la información que tienen a su disposición para lograr campañas de mercadeo exitosas”, dijo Juliana Vélez, directora regional para AdvocatesPRO de Fluvip, una firma especializada en mercadeo digital.
Según el Global Overview Report, a nivel global, hay 4.200 millones de usuarios activos en alguna red social. La cifra habría aumentado un 13,2% desde 2020 dadas las contingencias sanitarias y el papel que tomó la tecnología para el desarrollo de distintas actividades sociales y económicas durante este tiempo.
Aunque es un alto volumen, cada persona está expuesta a más de 6.000 anuncios diarios en distintas redes y formatos digitales, lo que implica una gran competencia de las marcas que quieren destacarse en Internet.
Por eso se recomienda utilizar:
Videos: la atención de los usuarios se centra mayoritariamente en los formatos video cortos, por la facilidad en que los generadores de contenido presentan información detallada, concisa y creativa sobre una marca o producto. El uso de plataformas como TikTok o los Reels de Instagram son indispensables para llegar a los nuevos consumidores, y por ende vitales para las campañas de marketing.
Contenido original: las publicaciones con más impacto son las que tienen un diseño novedoso, pensado para que se destaquen sobre la gran cantidad de información que hacen sentir saturados a los usuarios; así, la elección estratégica de elementos frescos e inspiradores (colores, fotografías, textos, etc) hacen parte fundamental en la toma de decisiones sobre el consumo de las marcas.
Rostros humanos: la presencia de las personas convierte el mundo digital en algo mucho más cálido y atractivo para los consumidores. Se pueden generar testimonios de uso de productos o servicios y también historias del negocio y de clientes, utilizando storytelling.
Nano influencers: El 84% de los consumidores confían más en los consejos dados por amigos y familiares, que en las reseñas; el impacto aumenta cuando estas reviews son hechos por personas cercanas al círculo social de los consumidores, quienes comunican desde su experiencia como usuarios.
Comentarios y me gusta: los usuarios suelen tener en cuenta distintos indicadores que den fe de la veracidad de la información dada por una marca, por lo que likes, estrellas y cantidad de veces compartida una publicación, entre otros, son algunas de las métricas que hablan más allá del contenido. Tener comentarios positivos en las redes y plataformas de la marca, no solo ayuda a la interacción de los usuarios, sino que potencia la reputación al momento de percibir un producto o servicio. ¿Cómo se logra? La planificación y la definición de objetivos de la inversión publicitaria en redes sociales favorece la interacción; también, responda a sus clientes.
“La actividad digital de las marcas ha influido en los consumidores, quienes han cambiado la manera de tomar decisiones de compra”, dijo Vélez. “El público está mucho más preparado, es curioso y activo en redes sociales, por lo que entender el mercado, es una estrategia clave para las compañías que quieren tener un mayor engagement en el marketing digital”.