Con la implementación de políticas ambientales, su pyme ayuda a la naturaleza y también reduce costos y aumenta su eficiencia. Hay varias medidas que se pueden aplicar en los negocios y tres pymes locales demuestran que sí es posible hacerlo.
El problema de la contaminación nos atañe directamente a todos.
- Según el documento Estrategia Nacional de Separación, Recuperación y Valorización de Residuos, el 25% de las 4.000 toneladas de residuos sólidos diarios, que se producen en el país, va a vertederos, calles, ríos o lotes baldíos.
- El 15% de las muertes en Costa Rica están relacionadas con la contaminación del aire, suelo y agua, exponerse químicos y las consecuencias del cambio climático según un estudio de la Organización Mundial de la Salud.
- El Informe del Estado de la Nación del 2017 advierte que “la mancha urbana aumenta de forma rápida y dispersa”, debido al incremento de la cantidad de vehículos y las dificultades para movilizarse por las vías. Se señala que el tratamiento de las aguas residuales es escaso y no existe un instrumento completo y actualizado de ordenamiento territorial.
Si bien la solución de estos problemas requiere de esfuerzos amplios, su pyme puede brindar un pequeño aporte para mejorar su situación a lo interno y en la comunidad en la que se sitúa. Además, tendrá beneficios adicionales.
- Un estudio de la organización no gubernamental CDP, determinó que las empresas que apuestan por la sostenibilidad alcanzan una rentabilidad financiera más alta (entre un 18% y 67% adicional) que sus competidores.
- Los consumidores son cada vez más informados y conscientes y prefieren adquirir productos de empresas responsables ambientalmente. Entre un 8% y 15% de la población en Costa Rica estima que la producción respetuosa con el medio ambiente es un factor que puede cambiar su decisión de compra de carne, piña, banano y café, de acuerdo con la Encuesta de Ambiente y Cambio Climático, elaborada por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y la Escuela de Estadística de la Universidad de Costa Rica en el 2014.
- Los consumidores señalaron que estarían dispuestos a pagar un precio mayor si el producto tiene alguna característica amigable con el ambiente.
¿Qué puede hacer su pyme?
Hay varias medidas que puede implementar en su negocio:
- Olman Mora, coordinador de monitoreo de proyectos institucionales de la Dirección de Gestión de Calidad Ambiental, recomendó a las pymes tener bien claras las etapas del proceso productivo de su empresa.
- Determine los niveles de consumo de agua, de energía, combustible, papel, plástico y otros materiales.
- Analice los residuos que se generan. Con base en ese diagnóstico, se puede crear un plan de acción.
- Adopte buenas prácticas, optimice procesos y realice cambios tecnológicos, recomendó Sylvia Elena Aguilar, coordinadora de Ambiente y Desarrollo de Cegesti.
- Las buenas prácticas no representan grandes inversiones e incluyen el uso de luz natural, reutilizar empaques o implementar un programa de gestión de residuos.
- La optimización de procesos tiene que ver con la implementación de controles y podría requerir inversiones, pero no onerosas.
- Los cambios tecnológicos, que pueden ser un poco más costosos, abarcan: instalar paneles solares, biodigestores, sustituir motores eléctricos de eficiencia estándar por motores de alta eficiencia, por citar algunos casos.
Ejemplos de pymes sostenibles
En el país existen pymes que nacieron con el objetivo de generar un menor impacto ambiental con sus productos o servicios, o que en la marcha decidieron aplicar medidas sostenibles.
Un ejemplo es el de Yuxta Energy, que se dedica a la instalación de paneles solares y que utiliza la tecnología para evitar gastos de energía.
Nació en el 2014 y está certificado como un negocio B por la organización no gubernamental B Lab. Las empresas B buscan crear un triple impacto: social, económico y ambiental.
De esta manera, se pueden dar cuenta si un equipo queda encendido o si se da un problema con alguno de ellos, pues brinda notificaciones.
La empresa, situada en Santa Ana, cuenta con dispositivos para no desperdiciar el agua y con sensores de movimiento para el control de la iluminación.
Yuxta, que tiene 13 empleados, recicla y participa en programas de voluntariado, como la limpieza de playas.
Otro negocio que tiene una visión ambiental es BlueTech, dedicado a elaboración de productos de limpieza y que creó una marca de cuidado personal denominada Blue Spa. Esta última se comercializa especialmente en diversos hoteles del país que cuentan con spas.
Surgió en el 2008 por una preocupación de su fundador, Luis Rodríguez, quien se autodefine como un “amante de la naturaleza” y es ingeniero químico.
Él recuerda que cuando era niño aún había ríos limpios, pero con el paso del tiempo se fueron contaminando.
Por ello, a él le preocupaba que los químicos que se usan en los productos de limpieza llegaran hasta los mares y ríos, por lo que estableció un negocio en el que se usan ingredientes biodegradables, de origen vegetal, sin derivados del petróleo.
En su empresa, que tiene 29 empleados y se ubica en Colima de Tibás, aprovechan la energía solar, evitan usar electricidad en su proceso productivo, no tienen aires acondicionados y emplean válvulas de control de agua.
Además, poseen un programa de reutilización de envases, de modo que aquellos clientes que llevan los recipientes de los productos adquiridos reciben regalías.
Según Rodríguez, la pyme está certificada con la norma ISO 14.000 y con la Bandera Azul Ecológica.
Dentro de los productos que desarrolla la empresa hay desinfectantes, detergentes, lavaplatos, suavizantes, jabones antibacteriales, champú, lociones para el cuerpo y jabones de baño, entre otros.
Por otro lado, el supermercado La Gallinita Feliz, ubicado en Coronado e inaugurado en 1988, ha puesto en práctica diversas acciones para mejorar.
Su deseo de ahorrar energía y de ayudar al ambiente llevó a su fundador, Bienvenido Zúñiga, a instalar en setiembre del año anterior 160 paneles solares.
De acuerdo con Zúñiga, la inversión fue de $54.000 y pasaron de pagar más de ¢600.000 mensuales en electricidad a ¢170.000 en el último mes.
El empresario de 63 años espera que la cifra se reduzca, a medida que mejora el tiempo y disminuyen las lluvias que han sido comunes en los últimos meses.
Incluso con el pago que deberá realizarle a la entidad que le hizo el préstamo (ahora está en un periodo de gracia), siempre pagará menos del costo de la factura eléctrica que tenía antes, comentó.
La pyme, que emplea a 37 personas, tiene otros proyectos a favor del ambiente. Por ejemplo, en su finca en San Pedro de Coronado ─de aproximadamente 12 hectáreas─ siembran árboles alrededor de la quebrada.
De la misma manera, cosechan por medio de la técnica de hidroponía lechuga y apio, que venden en el supermercado.
En los próximos meses, la empresa espera hacer un cambio tecnológico en sus cámaras de refrigeración y alcanzar nuevos ahorros.
Otros cambios a ejecutar en su empresa
-Aproveche la luz natural.
-Cómprele a proveedores comprometidos con el ambiente.
-Sensibilice a sus empleados sobre la necesidad de ahorrar energía y agua y motívelos a reciclar. Involúcrelos en el proceso y designe a alguien que se encargue de vigilar que se cumpla con las metas de ahorro.
-Utilice sistemas que recolecten agua de lluvia para que se use en los sanitarios o en el lavado de vehículos, por ejemplo.
-Establezca un presupuesto que le permita cambiar sus máquinas por unas más modernas y adapte los horarios de operación para trabajar en horas no pico y por turnos.
-Utilice luminarias más eficientes, como las LED.
-Realice cambios en sus sistemas para disminuir el uso de agua
-Analice en qué etapa de producción se generan más residuos, identifique las razones e implemente mejoras en el proceso.