Los hermanos Eduardo, Luis Pablo y Daniel Rodríguez y Brayner Villalobos empezaron a ver hace cuatro años que en el mercado de aprendizaje electrónico o elearning las empresas estaban requiriendo soluciones con mayor nivel de interactividad.
A las compañías e instituciones ya estaban llegando los jóvenes profesionales y técnicos que pertenecían a las generaciones que nacieron en la era de Internet, videojuegos, redes sociales y aplicaciones móviles, por lo que las plataformas tradicionales de entrenamiento o capacitación virtual no eran suficientes.
“Vimos la necesidad de cursos más interactivos, de 360° y con realidad virtual”, afirmó Eduardo, quien es ingeniero industrial, y cofundador de Aacrom.
LEA MÁS: Happy Box: el negocio familiar de cajas de regalo para que las empresas premien a su personal
Los hermanos Rodríguez y Braynner se conocían desde antes. Eduardo, Luis Pablo y Daniel regresaron en el año 2001 con sus padres a San Ramón de Alajuela desde Guanacaste, donde habían conocido y compartido con el músico Max Goldemberg.
Entonces crearon un grupo llamado Coyol, especializado en música folclórica ambientada con rock y ritmos latinos, el cual se mantuvo hasta el 2017 precisamente. Poco antes, habían participado en el Festival Internacional de las Artes (en 2015) y hasta grabaron un álbum, junto con Goldemberg y Olman Briceño, llamado Candil (en 2016).
Paralelamente cada uno también estaba haciendo su propia carrera profesional. Eduardo trabajó en una firma de elearning durante tres años y Luis Pablo y Daniel brindaban diversos servicios a la misma empresa. Daniel había empezado a estudiar animación digital por esa época.
Así empezó a cultivarse el sueño de tener una empresa dedicada a animación digital. Con la experiencia y el conocimiento del mercado (tanto local como en Chile, Perú, Panamá y México) vieron que cada vez era más urgente para las empresas contar con plataformas y cursos de elearning más interactivos. “Era lo que los clientes pedían”, argumenta Eduardo.
A la empresa la llamaron Aacrom. Eduardo confiesa que lo de la doble A es para facilitar que los encuentren en las búsquedas en Internet y lo de CR por las siglas del país. Hace medio año le encontraron un significado relacionado con el elearning, pues la gente siempre les preguntaba: “aprendizaje creativo”.
LEA MÁS: Todas las historias de EF Pymes
El paso fue a lo seguro, pues al inicio los subcontraron en la misma firma para la que trabajaron. Además, a partir de los contactos empezaron a surgir proyectos con dos entidades más. Para mediados de 2018 ya habían diversificado sus clientes y eran completamente independientes.
Empezaron cinco personas, pero la empresa fue creciendo (tiene 14 clientes) y actualmente reúne a 24 colaboradores, entre 20 y 40 años de edad. Algunos ellos estuvieron en el grupo de música Coyol ya sea por habilidades tecnológicas o en comunicación y locución, por ejemplo. “Hemos logrado retener a todos los clientes”, afirma Eduardo.
Aacrom brinda servicios de administración y hospedaje de universidades virtuales para empresas e instituciones que requieren contar con su propio centro de entrenamiento y capacitación, con logos, interface y cursos personalizados.
También se desarrollan cursos virtuales y simulaciones, ya sea para capacitación o para entrenamiento de personal, desde lo más básico (cómo abrir una cuenta en redes sociales, correo electrónico o cómo postularse para un puesto interno) hasta más sofisticados: Excel (en sus tres niveles) y sistemas de SAP o de Oracle, por ejemplo.
En el desarrollo de los programas de las universidades corporativas, los cursos virtuales o las simulaciones se utilizan tecnologías como 2D, recorridos 360°, realidad aumentada y realidad virtual. Se puede combinar, además, según los requerimientos.
La empresa se ubica en San Rafael de San Ramón de Alajuela, por lo que el 90% de los colaboradores son de ese cantón y el resto de Alajuela y Palmares.
Cada proyecto se inicia con sesiones entre el equipo de diseño instruccional de Aacrom (que incluye a especialistas en pedagogía) y los representantes de las empresas, para determinar las necesidades y luego crear un storyboard o un guión del curso.
La producción, que es el segundo paso, implica recursos en diagramación, diseño gráfico, animación, programación e implementación. También se cuenta con un equipo de soporte, que ayuda en los procesos de matrícula de las personas a los cursos y en materia técnica.
Aacrom desarrolló la visita virtual al Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) de Costa Rica. Debido a la pandemia se suspendió el programa de visitas de escolares a las instalaciones del TSE, donde conocían procesos como la elaboración de las cédulas y las funciones de la institución en materia electoral.
Con el patrocinio de la Fundación Konrad Adenauer, se creó este tour digital que se puede observar en cualquier tipo de dispositivo. El proyecto tendrá una segunda parte, aprovechando las próximas elecciones. Pero en la empresa están pensando también en cómo diversificar más su cobertura y su oferta.
“Para el próximo año la idea es abrir oficinas en Panamá y en México. Además, estamos invirtiendo en videojuegos educativos y también en gamificación, mediante juegos, donde las personas aprenden y obtienen recompensas”, adelanta Eduardo.