Oscar Mora estudió informática en la Universidad de Costa Rica (UCR) entre 1980 y 1986. Siendo estudiante, empezó a brindar clases de matemáticas y luego, ya graduado, se quedó como docente de computación hasta 1996. “Estuve dando clases durante doce años en la UCR”, cuenta Oscar.
En esa misma época, a partir de 1984, empezó a trabajar en el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y, como si de terminar un ciclo se tratara, en 1997 empezó a la firma de tecnología Unisys, en la comercialización de sistemas, ya que se requería una persona con conocimientos para realizar ventas consultivas y con autoridad técnica.
Doce años después fundó su empresa, junto con otros socios que ya no lo acompañan, Servicios Universales de Ingeniería (SUI). La idea era brindar soluciones en código abierto (conocido como open source), con sistemas basados en Linux, que son muy utilizados para plataformas y en servidores, así como en aplicaciones como Libre Office en ofimática.
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Los productos y servicios incluían también desarrollos en Python, PHP, Django y otros sistemas que se especializaban en diferentes tareas. Oscar y sus colaboradores estaban convencidos que el país dejaba de ahorrar dinero al no usar estas tecnologías.
Eran los tiempos cuando los sistemas instalados (on premise) y de marca dominaban el mercado, por lo que impulsar el uso del open source requería un esfuerzo mayor en evangelización y capacitación. También eran tiempos de cambio, donde las tendencias empezaron a apuntar hacia otras direcciones.
En aquel momento se dieron cuenta que, con la mayor difusión de las redes de Internet, se estaba expandiendo el uso de aplicaciones en la nube a nivel corporativo de la mano de firmas como Google.
Les llamó mucho la atención, contactaron a la compañía —que ya era un gigante tecnológico reconocido más allá del buscador— y se convirtieron en una de las desarrolladoras dedicadas a la implementación de sus soluciones en Costa Rica como partner o firma asociada. En su cartera de clientes suman más de 50 empresas, tanto de sistemas open source a la medida como de los paquetes de ofimática de Google.
En los negocios, como en todo, los cambios son constantes, continuos y cada vez más acelerados. Las oportunidades, permanentes.
Cuando se empezó a difundir el uso obligatorio de la factura electrónica, SUI lanzó una plataforma bajo un esquema de servicios de nube denominada Su Factura. El paso implicó que los contribuyentes a nivel empresarial también empezaban a dar un salto cualitativo más allá del uso de aplicaciones de nube en ofimática.
Ahora requerían servicios que integraran la factura electrónica y otras funcionalidades para su operación. SUI lanzó una solución para la gestión financiera, contemplando módulos contables, de inventario y factura electrónica.
La situación creada por la pandemia también fue un punto de quiebre para la compañía y también implica una oportunidad que no se limita al tiempo que duran las medidas sanitarias y las restricciones.
La industria tecnológica recalca que los servicios de software, plataformas e infraestructura se consolidaron, en especial con la situación vivida desde marzo de 2020 por la pandemia del Covid-19. La firma IDC estima que la soluciones y servicios basados en computación en la nube sumarán a nivel global $1 billón en el año 2024 y un ritmo de crecimiento del 16% anual, incluyendo inversiones en software y hardware.
Antes de marzo de 2020 en SUI venían pensando en desarrollar una aplicación para que un conductor pueda reservar espacio en un parqueo en el centro de San José o en otro lugar, de forma que no tuviera que dar vueltas hasta encontrar un sitio y así ahorrara tiempo.
Con el protocolo de mantener el aforo en comercios e instalaciones, para los restaurantes, barberías, salas de belleza, centros de salud, servicios de mascotas, talleres mecánicos, entidades públicas y otros sitios se volvió fundamental utilizar mecanismos de reservaciones o citas. La solución que venían pensando para parqueos se modificó.
SUI lanzó una aplicación web denominada Llegaré, que los clientes de los negocios utilizan a través de su navegador en cualquier dispositivo para establecer su cita y que las empresas administran también a través de la nube, utilizando Google Cloud Platform, al tiempo que no incurren en gastos de instalación o adquisición de la solución.
“Hay instituciones y bancos con filas enormes que se salen hasta de los edificios”, recalca Oscar. “Eso se puede minimizar con las reservaciones, evitando contagios de Covid-19 en este momento y dando tranquilidad a los colaboradores que están en atención al cliente”.
Para los negocios, que tendrán acceso a una consola de administración, implica eliminar o reducir las esperas, conocer el nivel de ocupación que tendrán, poder prepararse y brindar a su cliente la posibilidad de indicar si requiere un servicio especial, con tiempos y reglas preestablecidas, así como políticas para gestionar la flexibilidad que se requiera. Además, se orienta a mejorar la experiencia.
El mismo cliente recibe una notificación de la reservación, asegurándose que sus datos y requerimientos están correctamente indicados. La empresa podrá agregar o quitar recursos, cambiar horarios, tener tarifas diferenciadas, limitar las reservaciones en una porción o ampliarlas cuando termine la emergencia del Covid-19.
En el futuro próximo se agregarán funcionalidades, unas 25 más, para lo cual ya tienen un mapa de ruta y en el cual incorporarán la retroalimentación de las empresas, así como los requerimientos después de la pandemia.
Oscar indica que el uso de la solución es sencilla y “su instalación” o configuración es rápida, además de ofrecer la posibilidad de un pago por uso (el costo es de $75 por mes) que es negociable. “Estamos en un momento y en un mundo donde todos necesitamos crecer”, explica. “La empresa se registra y el sistema se parametriza en una hora”.
Tanto para las soluciones anteriores de factura electrónica y gestión financiera como para la aplicación de reservaciones se podrán incorporar nuevas tecnologías de inteligencia artificial y de cadenas de bloques (blockchain), que brinda seguridad, confiabilidad y trazabilidad en los registros de las transacciones.
Así los negocios puedan brindar una mejor gestión de sus operaciones, de la comercialización y de la relación con sus clientes, lo que permitirá desde personalizar la atención hasta automatizar procesos internos.
“Hay muchas oportunidades. Escuchamos ideas para diferentes tipos de plataformas. Creemos más en el futuro que en el pasado”, concluye Oscar.