La primera carrera de Beatriz Trujillo fue medicina. Al ver que el mercado laboral estaba saturado, decidió estudiar ingeniería de software.
Ella se dedicó a estudiar al finalizar su primer año de bachillerato en informática obtuvo un trabajo en esta área, en diferentes puestos y en distintas empresas.
Posteriormente concluyó la carrera y se graduó en informática.
“Software siempre fue una carrera que tuve como segunda opción, pero me di cuenta que en todo momento tuvo que haber sido mi primera opción”, dijo Trujillo.
Si está pensando en reinventarse, estudiar otra carrera, mejorar su currículum, tener una mejor oportunidad laboral o crear su propia empresa, este puede ser un buen momento para elegir una carrera tecnológica afín a lo que el mercado está necesitando actualmente.
Hay dos fenómenos que caracterizan estas ideas:
El reskilling, el cual surge principalmente de la digitalización de las empresas y hace inevitable que el trabajador adquiera competencias para desempeñar de forma correcta su trabajo teniendo en cuenta los cambios tecnológicos.
Y el upskilling, que es lo que llaman “capacitación adicional”, donde se forma al trabajador en otras materias que le ayuden a desempeñar de forma más efectiva las tareas del puesto de trabajo.
Objetivos reales
Ya sea que Usted se proponga mejorar las competencias técnicas como reinventarse profesionalmente debe saber lo que desea hacer.
El primer paso para lograr hacer una carrera en el mundo tecnológico es definir objetivos y metas que pueda alcanzar en plazos realistas.
Si lo que sueña, por ejemplo, es convertirse en desarrollador de videojuegos, deberá tomar en cuenta que no será de inmediato.
“Vaya despacio, capacítese, busque rodearse de especialistas y tener paciencia”, explicó Claudio Valverde, director académico de Universidad Cenfotec.
Valverde recomendó hacer una lista de objetivos reales y alcanzables para motivarse a seguir y a mantenerse en un buen camino, lejos de posibles frustraciones que se aparezcan.
Fortalezas
Conocer los puntos fuertes, es otro de los pasos.
Tenerlos claros ayudará a no perder la motivación, seguridad y confianza y le facilitará el entender qué área del mundo tecnológico es la ideal para cada persona.
Por ejemplo, si le gusta resolver problemas, el diseño y la creatividad puede enfocarse en el área web.
O también, si se trata de una persona ordenada, que se fija en los detalles y que tiene el poder de analizar más allá de lo evidente, puede incursionar en áreas de big data y analítica.
Siga aprendiendo
Continuar aprendiendo es el tercer paso, ya que es importante mantener una actitud positiva y siempre dispuestos a adquirir nuevos conocimientos.
La tecnología no es necesariamente un mundo sencillo y además se está reinventando constantemente. Por lo tanto, nunca llegará un momento en el que lo sepa todo.
Tampoco debe compararse, porque no todas las personas entienden la tecnología de la misma manera ni entran en este universo con los mismos conocimientos o experiencia.
Lo ideal es ir al ritmo que mejor le convenga, mantener la calma y no desesperarse.
Y no deje de intentarlo.
La única manera de dar el salto es intentándolo. No hay que castigarse por los errores que puede cometer y más bien aprenda de ellos.