¿Recuerda la historia de Grecia? El tucán que perdió una parte de su pico tras sufrir maltrato y que luego se recuperó gracias a que se le colocó una prótesis fabricada en una impresora 3D.
En el Fab Lab de la Universidad Véritas se realizaron sesiones de prueba y de investigación para hacer realidad esta novedosa prótesis que le permitiría a Grecia tener una vida normal.
Este laboratorio es un espacio en el que cualquier persona, sin importar su grado académico u ocupación pueda dejar volar su imaginación y experimentar con tecnologías como cortadoras láser, realidad virtual, cámaras 360 e impresoras 3D.
Siguiendo esta línea, la Universidad de Costa Rica (UCR) también inauguró un laboratorio, se trata de ProtoLab.
Sin pagar membresías ni mensualidades, los estudiantes, profesores, emprendedores e innovadores podrán tener acceso a las herramientas. Lo único que deben costear son sus materiales y cobros bajos como ¢200 por minuto en máquinas como la cortadora láser.
En la lista de laboratorios de prototipados también se suma el Kä Träre de la Universidad Estatal a Distancia (UNED).
Los laboratorios de prototipado tienen el objetivo de ser un punto de contacto dentro del ecosistema emprendedor. Quienes tienen una idea de negocio, pueden acercarse a cualquiera de estos centros y comenzar a construir el prototipo de su producto, además tendrán mentoría y acompañamiento de expertos.
Materializar ideas
ProtoLab fue inaugurado el 4 de abril en San Pedro de Montes de Oca.
Este centro nació con la idea de convertirse en un lugar donde converjan ideas innovadoras con tecnologías avanzadas y mentores que puedan dirigir los proyectos hacia el éxito.
Ricardo Carvajal, líder del equipo de ProtoLab, afirmó que el laboratorio pretende ser un espacio abierto para toda la comunidad y que permita que acceso a herramientas con las cuales se puedan crear grandes proyectos.
El ProtoLab cuenta con impresoras 3D, cortadoras láser, arduinos, así como con tecnologías básicas –soldaduras, alicates, etc. – que son necesarias para el prototipado.
"La red que se genera en ProtoLab es lo que más nos interesa. Vamos a ser el punto de unión y filtros que permitan que las comunicaciones sean más efectivas", afirmó Carvajal.
Para inscribirse las personas tienen que escribir a protolab@fundacionucr.ac.cr e indicar cuáles son sus habilidades y el proyecto que quieren desarrollar.
La idea es que las personas se acerquen al ProtoLab para construir sus ideas y determinar si el proyecto es viable o no.
El ecosistema de innovación y emprendimiento todavía carece de puntos de encuentro en los que los proyectos puedan fluir en el sistema económico nacional, ya que hay poco apoyo económico tanto del sector privado como el académico. Además hay desconocimiento sobre la existencia de estos centros en los que se pueden realizar las primeras pruebas del potencial de la idea. ProtoLab pretender ser esa primera base para que las personas se atrevan a probar, equivocarse y reintentar.
Con el ProtoLab como primer punto de encuentro de ideas, la UCR pone a disposición expertos en desarrollo de proyectos y si la idea de negocio es escalable, esta puede pasar a la incubadora y aceleradora AUGE, también de este centro educativo.
La inversión para construir y equipar el ProtoLab rondó los $130.000.
Diseño y fabricación
En el país existen otros laboratorios similares al de ProtoLab, como es el Fab Lab Véritas que el 24 de mayo del 2016 se incorporó a una red internacional gestionada por la Fab Foundation.
El lema de Fab Lab es que se puede hacer casi cualquier cosa, solo hay que desafiar la creatividad y el sentido emprendedor e inventivo.
Este espacio cuenta con impresoras 3D, corte láser, escáner 3D, router CNC, electrónica, diseño y fabricación.
Con estas tecnologías se ayudó a que el tucán Grecia pudiera tener una prótesis con la cual pudiera alimentarse e incluso cantar.
En el Fab Lab de Véritas se llevaron a cabo varias sesiones de trabajo para diseñar el pico de Grecia. Un equipo de expertos en diseño industrial participó dando criterios y consejos de diseño para el trabajo de moldeado de la prótesis.
Diego Camacho, director de proyectos de Véritas, afirmó que la entrada al laboratorio está abierta para todos los estudiantes, profesores, empresarios, emprendedores, autodidactas, diseñadores y cualquier persona creativa que desee plasmar su idea.
"Hay todo un equipo de diseño y producción para apoyar al usuario que lo necesite. Por ejemplo, puede solo tener la idea en mente y llegar al Fab Lab y contarla, que allí encontrará apoyo en diseño. Puede llevar un boceto de la idea e incluso llevar un diseño digital ya trabajado", añadió Camacho.
El laboratorio tiene a disposición la oficina del Centro de Apoyo a la Tecnología y la Innovación del Registro Nacional para que se puedan realizar procesos de propiedad industrial.
En el Fab Lab hay una tabla de precios y el costo final dependerá del proyecto, el servicio y la cantidad de tiempo que se requiera.
Por ejemplo, en corte láser el minuto tiene un costo de ¢200.
Fab Lab Kä Träre de la UNED es el espacio que creó esta universidad para incentivar la investigación y el prototipado de proyectos.
Nació en agosto del 2014 y desde ese momento se encuentra en desarrollo y crecimiento. En junio del 2017 el laboratorio entró a la red internacional de Fab Labs bajo una iniciativa del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) a través de Fab Foundation.
Esteban Campos, investigador del , explicó que Kä Träre es un espacio de fabricación digital en el que cualquier persona, interna o externa a la UNED, puede desarrollar sus prototipos y proyectos de investigación.
Los proyectos que se trabajan son de áreas variadas como biología, conservación, estimulación temprana, educación especial, inclusión digital, planificación quirúrgica, arte y diseño interactivo.
Los proyectos se trabajan de forma multidisciplinaria, entre profesionales del laboratorio, la UNED e instituciones públicas y privadas.
Kä Träre está dotado de tecnologías como impresión 3D, arduinos (open hardware), corte láser, escanner 3D, plotters de corte, videomapping, LED mapping, corte CNC, modelado 3D, cámaras 360, visores de realidad virtual y diferentes tipos de software.
"Hemos trabajado con estudiantes de la UNED, funcionarios, investigadores, empresa privada, instituciones gubernamentales, emprendedores, ONGs, incluso con otros laboratorios de Latinoamérica. Dependiendo de los requerimientos y necesidades se definiría cómo se cubriría lo necesario para el proyecto", añadió Campos.
La inversión en equipo de este laboratorio fue de unos ¢83.000.000.
El abanico de opciones para los emprendedores es cada vez mayor. Las universidades pretenden crear opciones para que más emprendedores comiencen a palpar sus ideas de negocio dentro de un ambiente de prueba y error, para que salgan más preparados a cazar recursos.