Globant, el unicornio tecnológico que anunció este 1.° de noviembre la apertura de un centro de desarrollo en Costa Rica con 200 vacantes, insiste en su enfoque en el desarrollo del talento, ir más allá del status quo en sus soluciones a los clientes, el crecimiento al que la firma argentina está dispuesta y los desafíos del mercado actual.
“Es un mercado que está muy exigente”, dijo Santiago San Martín, country manager de Globant en Costa Rica y México. “Hay tecnologías que tienen menos de un año y los clientes nos piden perfiles con experiencia de más de cinco años. Es una encrucijada”.
Santiago San Martín ejemplifica el rápido crecimiento de su compañía con su propia experiencia: empezó trabajando en la compañía hace 11 años como pasante. Hoy tiene a cargo a más de 3.000 personas y es responsable de la operación de México y Costa Rica.
“Somos una compañía de desarrollo de software y transformación digital que aplica inteligencia artificial y aprendizaje automático (machine learning) a distintos procesos. Ofrecemos soluciones digitales. Un cliente viene con alguna problemática que sabe que tiene, o que en algunos casos sabe que tiene un problema pero no sabe exactamente qué. Ahí es donde ofrecemos la solución digital”, dijo San Martín.
Globant incluso lanzó en 2020 junto con Steve Wozniak, cofundador de Apple, un servicio en el cual aplica la inteligencia artificial a funciones y procesos para mejorar las interacciones de una empresa con sus clientes, su cadena de suministro o en la recopilación de datos.
¿Las soluciones son en la nube e incorporan inteligencia artificial y herramientas de industria 4.0?
Ofrecemos un abanico de posibilidades. Desde un punto de vista técnico nos dividimos en más de 20 estudios, que albergan ciertas prácticas: nube, inteligencia artificial, machine learning, datos, pruebas, ingeniería o diseño.
Por ejemplo, con Disney tenemos una solución para pulsera llamada Magic Band, la cual gestiona los servicios y atracciones que puede disfrutar el visitante y su grupo. Desarrollamos la inteligencia que está por detrás de esa pulsera y para que la experiencia del usuario del parque sea mucho más placentera, agradable, más personalizada.
¿Cómo surge Globant y que hace que se convierta en un unicornio?
Surge después de la crisis de Argentina del 2001. En ese momento, cuatro amigos —que siguen siendo socios de la compañía: Martín Migoya, Guibert Englebienne, Martín Umarán y Néstor Nocetti— se juntan después del trabajo y empiezan a disparar ideas, empiezan a soñar y empiezan a diagramar la compañía de sus sueños. El presupuesto inicial fue de $5.000, que se convirtieron en esta compañía de más de 20.000 colaboradores.
Uno de los hitos más importantes que la compañía tuvo durante los primeros años fue en 2007 cuando Google decide convertir a Globant en el vendor externo. Somos la primera compañía en el mundo que colocó personas que no eran de Google en sus oficinas para hacer desarrollos.
¿En qué momento da el salto a convertirse en unicornio?
En 2014 nos convertimos en la primera compañía latinoamericana desarrolladora de software en cotizar en la New York Stock Exchange. La oferta pública inicial (IPO, por sus siglas en inglés) está muy relacionada con eso. Salimos con unas acciones con un costo de $10 y hoy está arriba de $300.
¿Cuál es el principal factor que lleva a la empresa a convertirse en unicornio?
La cultura organizacional. La manera en la que nada nos da miedo, pues constantemente desafiamos el status quo. El éxito de la compañía es formar un solo equipo, cómo te acompaña, cómo se puede hacer carrera dentro de la compañía aunque no seas de ingeniería y de pensar en hacer cosas diferentes.
Somos una compañía que constantemente está orientada a generar talento. Cuando empecé a trabajar, una de las cosas que me marcó, fue cuando me dijeron que Globant va a estar donde el talento esté. Ese es el porqué estamos en Costa Rica.
La expansión de la compañía empezó en Reino Unido.
Uno de los clientes era del Reino Unido y se abrió la primera oficina ahí. Ahora estamos en 17 países y en algunos como la misma Argentina en varios sitios. Estamos en Uruguay, Chile, Brasil, Perú, Colombia, Estados Unidos, Bielorrusia, Rumania y en India, entre otros. Estamos un poquito como por todos lados. Y seguimos creciendo.
¿Qué se tendrá en Costa Rica?
En Costa Rica será un centro de desarrollo, donde queremos generar capacidad técnica para acompañar a los clientes en su transformación digital. La pandemia aceleró todos los procesos de digitalización. Tenemos una explosión de negocio y definitivamente necesitamos generando capacidad y talento.
Hemos encontrado una Costa Rica con ganas, que tiene la manera de ver las cosas muy parecida a la nuestra de desafiar el status quo, de cambiar y de ser un protagonista del cambio en la región Latinoamericana.
Hay una realidad: la escasez de talento técnico en la región y en el mundo. La misión es acercarnos y generar talento en lugares donde alguien más no está mirando.
El primero son las personas con experiencia, a quienes se puede empoderarlos y llevarlos al próximo nivel, que se entrenen en cosas nuevas en un mercado que está muy exigente, donde hay tecnologías que tienen menos de un año y los clientes nos piden perfiles con experiencia de más de cinco años. Es una encrucijada y necesitamos entender esa brecha.
Y el segundo es lo que llamamos el talento oculto: está pero falta que alguien se ponga la camiseta y que pueda dar las herramientas necesarias para que se pueda desarrollar ese talento: mujeres en economías vulnerables o inmigrantes forzados. Hay organizaciones no gubernamentales que trabajan con ellas y nosotros los apoyamos para el desarrollo de las habilidades blandas y damos la posibilidad de emplearse.
¿Cuál es la inversión en Costa Rica?
Hoy estamos iniciando la operación acá. En México, hace siete años y medio, fui el primer glober y ahora la compañía tiene más de 3.000 personas en tres ciudades diferentes. Ese es un comparativo de la escalabilidad que nos gustaría tener también en Costa Rica.